"Nos mueve la convicción de que a nuestra hija algo muy grave le sucedió. Este caso es un suicidio femicida", afirmó Alejandro Barra.
A dos años de la muerte de Antonia Barra, joven de 21 años que se quitó la vida tras el presunto abuso y violación por parte de Martín Pradenas, su familia lideró una emotiva ceremonia en la plaza Aníbal Pinto de Temuco.
En la instancia, Alejandro Barra, padre de Antonia, aseguró que "lo único que nos mueve en esta oportunidad es la reflexión. Reflexionar qué estamos haciendo como familias, qué hacemos como víctimas, qué hacen las autoridades, qué hacen los responsables de que ustedes como víctimas obtengan justicia. Solo pensar y que cada uno al termino del día concluya con satisfacción o con una deuda".
"Es para todos: si no hacemos algo, nada va a cambiar. Nosotros nos movemos por todo el apoyo que hemos obtenido desde el inicio de esta causa. Nos mueve la convicción de que a nuestra hija algo muy grave le sucedió. Este caso es un suicidio femicida. Palabras que hace décadas nuestras mujeres han insistido", añadió.
Además, Barra explicó que "ya hace un par de años las cosas en este país están cambiando y deben cambiar para mejor. Mantener lo que hay es injusticia. Solamente queremos justicia, que se investigue, que las personas a las que les delegamos la responsabilidad en este país cumplan su cometido".
"Hay noche que uno llora"
"Antonia tenía muchas virtudes, era una mujer hermosa. Creemos que lo que estamos haciendo es una motivación sobrenatural para pararme como lo he hecho desde el primer día. Siento el apoyo, en las redes, en las noticias y los medios que se dedican a difundir", añadió.
Con voz quebrada, Alejandro Barra reconoció que "hay noches que uno llora, hay días que se recuerda a una hija que ya no está. ¿Qué hizo ella? Fue víctima de un delito, así como aquellas madres que no han logrado justicia, yo les digo hoy día: tenemos el control, tenemos el poder y podemos cambiar esto, podemos tener un mejor país y podemos tener personas idóneas en la PDI y la Fiscalía".
Cabe recordar que Pradenas permanece recluido en la cárcel de Valdivia y está siendo investigado por distintos delitos sexuales. Además del presunto ataque a Antonia, el joven cuenta con otras seis denuncias de abusos y violación.
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