Humberto Zepeda intercambió algunas palabras con su hijo, a quien acarició tras confirmarse la condena.
Luego de discutir por largas horas, el jurado del caso Narumi Kurosaki decidió declarar culpable a Nicolás Zepeda, quien deberá cumplir una condena de 28 años.
Según detalló L’Est Républicain, la reacción del chileno llamó la atención en la sala.
“Desapareció de la vista (general) detrás de la barandilla de su palco, con la parte superior del cuerpo inclinada hacia adelante. Su padre, hasta entonces fijo en la pantalla de su teléfono, se levanta y se acerca a su hijo para consolarlo. Intercambia algunas palabras y Humberto Zepeda le acaricia el cabello”, describe el medio francés.
Por su parte, el abogado de Zepeda confirmó el siguiente paso que darán como defensa, a petición de la familia: llevarán el caso al Tribunal de Casación.
“Esta jurisdicción parisina tiene una particularidad. No le preocupa el fondo del caso, es decir las pruebas y la culpabilidad o no del acusado. Lo único que importa es la forma. Si los abogados de Nicolás Zepeda logran detectar un vicio procesal, un error jurídico, y la Corte considera admisible su ‘recurso’, la condena de Nicolás Zepeda sería anulada”, precisa el medio francés.
La esperanza de Nicolás Zepeda
En otras palabras, si existe un vacío legal en el juicio, la sentencia dictada hace pocos minutos podría borrarse.
Eso sí, en caso de superar ese “obstáculo”, el chileno no se encontraría libre de todos los cargos: habría un tercer juicio ante un tribunal de lo penal.
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