A primera hora del día, miles de personas utilizan el transporte público para trasladarse a sus lugares de trabajo y el Metro de Santiago, en la Región Metropolitana, asoma como una buena alternativa para hacer un viaje expedito, sin grandes tacos y llegar a la hora.
Pero la mañana de ayer, el periplo a bordo del tren subterráneo, específicamente, en la Línea 6 se convirtió en un verdadero caos para aquellos que se movilizaban de poniente a oriente.
Eran las 07.25 horas en la estación Bío Bío y uno de los carros que recién había llegado al andén, procedente de Franklin, se encontraba con serios dramas: sus puertas no se alineaban con la barrera de protección y los pasajeros no podían abordar ni descender de los vagones. O sea, todo mal.
"Estuvimos mucho rato con las puertas cerradas. El carro no avanzaba. De repente, varios miramos para atrás y vimos una luz -iba en el último vagón- que se acercaba a alta velocidad.
Era un tren que se dirigía hasta la estación donde estábamos atrapados. En eso, se abrieron las puertas, alguien gritó 'evacúen' y todos salieron arrancando. Fue un momento súper angustiante", relató Víctor Flores a La Cuarta.
Pánico
Sus palabras fueron ratificadas por otros usuarios del Metro que a esa hora viajaban en el mismo tren. "Se abrieron las puertas porque venía otro tren y todos salieron corriendo, desesperados, hubo gente que se cayó al querer salir y los que venían de atrás pasaban por encima, los pisaban", aseguró Fatme Musa.
La publicista que todos los días aborda esa línea para llegar a su trabajo, en la comuna de Las Condes, contó que todos los pasajeros creían que el tren que venía del túnel iba a chocar el que estaba estacionado en Bío Bío. Por esa razón, bajaron desesperados. Sin embargo, a último momento el carro se cambió de riel y todos respiraron aliviados.
"No había personal de Metro que pudiera orientar a la gente sobre lo que pasaba. Por eso, muchos nos asustamos con lo ocurrido", agregó la joven.
La falla. Desde el Metro de Santiago agacharon el moño respecto a lo sucedido y a través de un comunicado explicaron que el desperfecto que paralizó las estaciones Cerrillos y Bío Bío "se debió a la activación intermitente de los sistemas de autoprotección de algunos trenes que circulaban en el tramo" antes señalado.
Respecto a qué ocasionó el incidente, desde la empresa del tren subterráneo aseguraron que "la causa basal de este problema aún se encuentra en investigación".
Lo habían advertido
En tanto, desde el Sindicato de Trabajadores del Metro dijeron que esto iba a pasar. "Advertimos a la administración hace unos años que no estabamos en contra de la automatización, pero solicitabamos que hubieran cabinas y conductores que ejercieran las labores de monitores de seguridad porque no iba a ser fácil", aseguró Eric Campos.
Respecto a lo ocurrido puntualmente en la estación Bío Bío, el vocero de los trabajadores argumentó que "el gran pánico que se generó fue porque la gente pensó que los trenes funcionaban solos y se iban a producir choques. No había personal que trabajara en el proceso de evacuación. La Línea 6 se enfocó en la tecnología y desechó la atención al usuario. Ese es el corazón del servicio".
Lo anterior tiene relación con lo señalado por los propios pasajeros, quienes dijeron que a la hora del inconveniente no había quién les brindara ayuda. "Cuando estábamos parados, una persona presionó el botón de emergencia y le respondieron que 'en este momento no podían ayudarlo'. Nada funcionó", aseguró Fatme Musa, quien agregó que "en un momento pensé que habían tirado una bomba o una persona estaba disparando, porque nadie del Metro ayudaba y sólo aparecieron unos Carabineros".
En tanto, Víctor Flores contó que el servicio se estableció de forma reguleque, ya que cuando pudieron salir de Bío Bío hubo harto show en las otras estaciones. "Cuando íbamos en Estadio Nacional una señora del aseo tuvo que ayudar al conductor que tomó el contro de nuestro carro a alinear las puertas con las barreras para que la gente pudiera salir. No había ni un guardia", contó.