Durante el verano, los papitos deben tener ojo con con lo que comen sus brocacochis, ya que con el relajo de las vacaciones, se desordenan los horarios pa’ manyar y hacer tuto.
Según suelta la profe de Nutrición y Dietética de la U. San Sebastián, Daniela Maraboli, "debemos respetar los cuatro tiempos de comida (desayuno, almuerzo, once, cena) en las horas correspondientes. Además la profesional agrega que "hay que mantener una alimentación variada y equilibrada, y una hidratación acorde a la necesidad".
Para que el consumo de alimentos saludables no sea fomeque, los padres pueden utilizar estrategias para servir de forma más llamativa y colorida las frutas, verduras y lácteos a los niños. De esta manera se reduce el consumo de alimentos perjudiciales, especialmente aquellos cargados al azúcar, de alto contenido graso y sodio, los cuales son los principales precursores que a los peques les salga guatusi.
Por otro litro, también es importante que los chicocos tomen de 1,2 a 2 litros de agua al día, lo cual puede ser a través de aguas con sabor, jugos de frutas naturales, fruta cocida, entre otros.
Respecto a la comida chatarra, la nutri comenta que "se debe evitar su consumo, reemplazando papas fritas compradas, por papas horneadas hechas en casa (manteniendo la forma), preparar sándwich con carnes bajas en grasa, palta, tomate, lechuga. Como snack preferir cabritas sabor natural, cereal natural de arroz, frutos secos, palitos de verduras (zanahoria, pepino, apio, etc.)".