Los dos sujetos que fueron arrestados, según la investigación, distribuían cocaína y marihuana en distintos puntos de la comuna.
Por cerca de cinco meses se extendieron las indagatorias en el marco de la denominada "Operación Yugoslavia", hasta que finalmente la Policía de Investigaciones de Curicó dio con los dos hombres detrás de la venta de sustancias ilícitas en el sector nororiente de la comuna, a través de un sistema de delivery.
El jefe local de la Brigada Antinarcóticos y contra el Crimen Organizado (Brianco), Marcelo Rivero, informó que, en un trabajo mancomunado con la Fiscalía, descubrieron "una banda criminal organizada, dedicada a la distribución de clorhidrato de cocaína a diferentes partes de la ciudad, vulnerando todas las restricciones sanitarias que existen".
Según explicó la autoridad policial, los dos sujetos detenidos corresponden al "proveedor" y "al distribuidor". Además, dijo que se incautaron aproximadamente 8.500 dosis de la droga y otras mil de cannabis, además de un arma de fuego con dos cartuchos y vehículos, "sumando en total más de $35 millones".
El modus operandi de la banda era simple: sus clientes los contactaban por WhatsApp, hacían sus pedidos y luego "la banda los llevaba a domicilio movilizándose en vehículos. Contaban con permisos en caso de que fueran controlados, los que fueron obtenidos de forma normal, pero usaban ciertas garantías que les permitían desplazarse".
Rivero, además, confirmó que uno de los detenidos "ya tenía antecedentes por infringir el artículo 318, por lo que el otro salía".
El abogado Julio Herrera, quien asumirá la defensa de los individuos, adelantó que "el fiscal pedirá prisión preventiva, a lo que obviamente nos vamos a oponer porque hay personas que no tienen antecedentes".
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