Por tercer día consecutivo, los pelequeninos pitearon en protesta por la planta de tratamiento de residuos orgánicos Colhue S.A., ubicada en la región de O'Higgins.
Los vecinos están chatos de los olores guácala, la plaga de moscas, los ratones, las infecciones y los dolores de cabeza que dicen sufrir por la cercanía con la empresa. Por eso, exigen su cierre.
"Mi sobrino está enfermo por los malos olores. El pueblo esta hediondo a caca, lucharemos hasta el final para que de una vez por todas esta empresa tome su caquita y se vaya", dijo el pelequenino Jaime Navarro.
En medio de la indignación, los vecinos impidieron el paso a un camión que se dirigía a la planta de lodos, bajaron al conductor y cruzaron el vehículo en la calle principal.
"Las autoridades no han tomado el toro por las astas y no han decretado el cierre", dijo Luis Barría, alcalde de Malloa, comuna a la que pertenece Pelequén.
El diputado por Rancagua y miembro de la comisión de salud del Congreso, Juan Luis Castro, le prestó ropa a los vecinos y soltó en la dura: "se ha desoído el clamor de la gente de Pelequén, que cada día vive prácticamente en la mierda. Perdonen que lo diga con esta claridad. Pediremos formalmente el cierre del vertedero Colhue de Pelequén, que lleva tres años funcionando en la impunidad y que hoy día tiene en riesgo de contaminación grave a niños, vecinos y ancianos".
El seremi del Medio Ambiente de la VI Región, Juan Prieto, aseguró que la empresa Colhue S.A. ha sido multada tres veces y "si eventualmente se encuentran incumplimientos graves y reiterados que ameritan su cierre, lo vamos a cerrar", sentenció.
La empresa señaló que cuenta con la documentación al día y que son los camiones los que provocan los malos olores al pasar por el centro de Pelequén.