Durante meses lo planeó y a la hora de la verdad no se notó pobreza. Harto manye, harto drinking. Pero a Nelson Tapia igual se le salió algo del libreto. Llegó Alexis, su "hijo", y ahí sí que su adiós al fútbol fue total.
Más de 300 parroquianos comprobaron que el meta no andaba en peyote cuando les decía a sus amiguis de Francia 98 que el día en que colgara los guantes iba a ser distinto.
En su choza de Molina, que nada tiene que envidiarle al patio de Farkas, el "Simpson" reunió a Iván con su María Alberó, más regia que nunca, Poli, Pedro Reyes, Rozental y Clarence Acuña. Pura belleza.
La idea era jugar una pichanga, mientras Pancho del Sur contaba chistes fomes y los mozos quedaban acalambrados de tanto servir choripanes, completos y, por supuesto, vino. Harto vino.
Pero la fiesta como tal prendió cuando llegó el maravilloso. El "Cabeza de Muela" admitió que "lo había invitado, pero no creí que viniera. Estoy muy feliz, pues Alexis es como mi hijo", relató el "Cabeza de Muela", mientras el "Dilla" le decía "tía, tía" a Paola, la esposa del festejado que le limpió los mocos en Cobreloa.
Con un look coquipelado a lo Vin Diesel, Sánchez de un segundo a otro importó más que el cordero que se asaba al palo y la chela fría. Y como si nunca se hubiese lesionado en Udinese, hasta se dio maña para meterse a la pichanga y, por supuesto, hacer un gol. Luego que se le fuera un penal, eso sí.
Por la noche, cumbia. Al son de los "Hechizo" la concurrencia bajó la comida a puro zangoloteo. Y Alexis, el alma de la fiesta, se entregó al ritmo, ritmo, ritmo. Menos mal que la maldita lesión quedó atrás.
"COMO SUEGRO, MI VIEJO TAMBIÉN ES EL NÚMERO 1"
Ya con 20 años Geraldine, la mayor de las regalonas de Tapia, acompañó a su taita en la hora del adiós, y destacó la que para ella es la mejor de sus gracias: "Como suegro también es el número uno. Si hasta sus copetes se toma con los que me cortejan a mí y mis hermanas".
Geraldine tampoco olvidará el adiós de su papi, porque ella se quedó con la camiseta que el "Dilla" le trajo al festejado de Udinese. "Tenemos la misma edad con Alexis y somos amigos. Así que esta polera debía ser mía", dijo.
Por Natalia Galaz A. /Enviada a Molina