Debido "al temor que siente de ser reasignada" pedirá mañana que se decrete su permanencia definitiva en el CPF San Joaquín
Hace once años María del Pilar Pérez López se encuentra recluida en el CPF de San Joaquín, cumpliendo la pena de presidio perpetuo calificado.
Debido al carácter de sus condenas, y lo mediático del caso, la reclusa vive su encierro en un módulo especialmente habilitado, denominado "Custodia Especial", donde hasta hace muy poco convivía con siete reclusas más.
Desde mediados de octubre y durante noviembre, han sido reasignadas varias condenadas que llevaban años compartiendo dicha "custodia especial" con Pérez López. Esto, según su defensa, a cargo del bufete de abogados AB &T, "ha generado que nuestra representada sienta temor de que sea reasignada a otro centro de cumplimiento penitenciario, cuestión que sería del todo perjudicial y atentatorio para su integridad física y psíquica".
Sus defensores aseguran que sería exponerla al riesgo de que internas condenadas de otros recintos, donde "eventualmente" pudiera ser trasladada, "atenten en contra de su integridad" y el traslado a otro lugar "termine convirtiéndose en un castigo o sanción".
Solicitud
Para solicitar que se decrete la permanencia definitiva de María del Pilar Pérez en el módulo de custodia directa del CPF, sus abogados pidieron al Octavo Juzgado de Santiago que fijara una audiencia de "cautela de garantías", para debatir la "permanencia definitiva de la condenada.
Al final, la jueza Patricia Ibacache, del Octavo Juzgado de Garantía de la capital, fijó audiencia de cautela de garantías para mañana y autorizó la petición de la defensa de que la condenada sea llevada por personal especializado de Traslado de Alto Riesgo (TAR) de Gendarmería de Chile.
"En razón de que ella fue condenada por un caso de mucha connotación pública, pedimos que personal especializado la traslade desde la cárcel al tribunal y desde el tribunal a la cárcel", dijo el abogado Pablo Armijo.