[Perfiles] Emp, el mejor jugador latinoamericano de League of Legends

Benjamín Ramírez (20) tiene una vida poco normal. Vive en una casa gigante de Huechuraba sin adultos, solo con sus amigos, quienes se levantan tipo 12.00 para una jornada muy atípica: comienza su día comiendo algo mientras ve algunos videos para luego meterse al compu y empezar a entrenar. Se detiene solo para comer y tomarse un recreo, pero su mente no para hasta las 00:00.

El Benja es chileno pero lo conocen incluso en Corea. Nadie lo llama por su nombre eso sí: para todo el mundo es Emp, el apodo que usa en el juego. Es el mejor jugador de League Of Legends (LOL) en Latinoamérica, algo así como un Alexis Sánchez en esto de los deportes electrónicos. Y es nuestro, eh.

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Cuando Guillermo Schiess levantó el Teatro del Lago a orillas del Llanquihue, nunca imaginó que algún día se usaría como centro de reunión para un evento del mundo gamer.

Es que en las oficinas de Riot Games, empresa creadora del League of Legends, decidieron que Frutillar era la ciudad perfecta para reunir a cientos de ñoños en la final de la Copa Latinoamérica Sur (CLS), donde se definió el cupo a la Mid-Season Invitacional, donde van los campeones de todo el mundo.

No se equivocaron: en menos de 6 horas se agotaron las mil entradas que la organización puso a la venta. Viajó gente de Santiago, Argentina, Uruguay y otros países. A través de internet fueron miles de ciberñoños que siguieron al detalle las casi seis horas de transmisión online. Pero… ¿qué miéchica es League of Legends?

Dos equipos de cinco jugadores eligen entre 40 campeones un personaje del juego y la meta principal es derrotar la base del enemigo, cada uno cumpliendo un rol.

Los players deben desarrollar aspectos tales como el trabajo en equipo, organización, colaboración, pensamiento estratégico y liderazgo.

Son más de 100 millones de jugadores inscritos los que día a día se divierten con League of Legends, jueguito catalogado como un deporte electrónico.

¿Cómo? ¿Jugar en el computador es un deporte? Y sí, incluso en Corea existe un Ministerio especial que se encarga de los Esports, donde el Estado regula aspectos básicos de la actividad.

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Hace un par de años Emp estudiaba en Copiapó y vivía solo junto a su madre. En el colegio era brillante, el mejor de su curso.

"Los profesores decían que tenía una inteligencia superior"

, dice Nadia Mercado, la mami del Benja.

Con un buen puntaje en la PSU, Benjamín estaba en la disyuntiva: ¿estudiaba o intentaba ser profesional de LOL? Decidió pedirle un año sabático a su vieja. En eso le llegó una buena oferta.

Emp tenía un equipo amateur que a punta de esfuerzo consiguió su cupo en el profesionalismo. La estructura de la gente que administra el juego lo permite.

Isurus Gaming era un equipo que por esa época quería ser profesional así que aprovechó el cupo conseguido por Benjamín y sus amigos y los ficharon a todos. Hace un tiempo Marcelo Salas hizo algo parecido con Deportes Temuco, donde usó el cupo del Indio Pije para unificarlo con Unión Temuco y hacer un solo team.

Emp y su equipo debía solo entrenar mientras que la marca del tiburón se encargaría de todo lo demás: la casa de los profesionales, los aspectos legales, la imagen del plantel, el marketing y cómo generar ingresos extras por publicidad y merchandasing.

De repente ahí estaba de nuevo la oferta, ahora concreta. ¿Debía estudiar o trabajar? Se fue a matricular a la U "por las presiones sociales", según cuenta su mami. Pero no era feliz. Nadia al toque se dio cuenta y le dio el empujón que necesitaba.

"Me dijo que se sentía presionado por su papá. Cuando nos separamos me saqué la mugre por él. Le dije que chao con todo. Si tenía que importarle algo era mi opinión. '¿Verdad mamá?', me dijo. 'Sí', le dije yo, 'hazlo, yo pongo la cara porque después no lo podrás hacer'. Si no lo hacía en ese momento no lo haría nunca", cuenta su vieja, que dejó Copiapó para vivir en La Serena junto a su pareja y sus otros dos hijos. Esa simple conversación detonó en el nacimiento del mejor jugador latinoamericano en la actualidad.

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Para llegar a ser una potencia dentro de los Esports se deben incorporar los formatos de los mejores equipos en el mundo.

Los rusos, coreanos y brasileños son las potencias mundiales en esto. En Chile recién se están adaptando algunas cosas. Uno de los primeros conceptos fue el de la Gaming House, casa donde convive todo un equipo las 24 horas del día.

El tema sorprende por su profesionalismo. Cada team tiene un entrenador, un manager, sicólogos y traumatólogos. Los jugadores que habitan sus Gaming House, se dedican solo a entrenar y ganan un sueldo que no baja de los $600.000.

Riot Games se encarga de darle toda una organización muy profesional, mientras sus equipos le pagan todo. Viven gratis.

, confiesa Emp.

"Realmente igual hay un sufrimiento. Por ejemplo, en noviembre y diciembre todos están con sus familias o de vacaciones en la playa y nosotros estamos entrenando lejos de nuestras familias, de nuestras novias, de nuestras mamás, de todo. Tenemos esa sensación de no estar, de soledad, y eso también hace que el equipo se una porque estamos todos compartiendo el mismo sufrimiento", cuenta Mark "Ukkyr" Leuenberger, el entrenador de Isurus.

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El año pasado Isurus Gaming, el equipo de Emp y sus amigos, llegó a la final del Torneo de Clausura como amplio favorito y se churreteó.

Era la segunda final de Benjamín. La primera la tuvo a los 19. Debutó joven, a lo Alexis.

Desde que los tiburones irrumpieron en la arena con un plantel joven se transformaron en los mejores. Han sido el único equipo latinoamericano en viajar a Corea por un mes para perfeccionarse allá, con los campeones del mundo.

Este año, en el Teatro del Lago de Frutillar, disputaron su tercera final ante Furious Gaming. Fue como un superclásico. Ganaron por fin.

Emp fue el MVP de la final en el Teatro del Lago destrozando a su rival de turno, un uruguayo seis años mayor, de amplia trayectoria en el mundo gamer. No le importó nada. Al mejor de cinco, Isurus lo ganó 3-0. La hizo corta.

Algunos pronostican que en poco tiempo la competencia le quedará chica. Todos coinciden en que el copiapino es el mejor exponente por estos lados. Él no se marea.

"Aunque suene cliché, es un hombre muy limpio de adentro. Tiene todo muy claro. De hecho he quedado impresionada con decisiones que ha tomado solo porque yo siempre lo sobreportegí. Lo llevaba para todos lados, incluso al ciber en sus comienzos", cuenta su mami, que le dio la suerte justo en su tercera final. En las otras dos que perdió no pudo viajar para acompañar a su Niño Maravilla.

"Al principio, al igual que todos, los papás, se muestran un poco reacios, pero después cambian. Ahora deben estar encantados por todo lo que conlleva esto, onda el escenario, las luces bonitas, los videos. Se nota mucho el trabajo que hay detrás de esto. Todo es demasiado profesional", confiesa el progamer.

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Emp sabe que es el mejor, lo ha sido a lo largo de estos años. Con 20 primaveras se echa la responsabilidad de todo el equipo al hombro. Nunca desentona.

"Si bien es más pesada la responsabilidad que me dan y más complicado, me gusta porque puedo demostrar lo que valgo. Es una motivación extra", la tira.

- ¿Tienes planes a futuro lejos de los deportes electrónicos?

- Yo en verdad quiero estudiar aunque no sé qué exactamente. También está la opción de que pueda tener una carrera en Esports. Con la fama que consigues en esto puedes tener muchos seguidores y podría generar dinero de otras maneras. Uno después de ser proplayer puede seguir en el rubro como entrenador, comentarista o relator, pero estudiar sicología era lo que estaba en mis planes.

Corea es el país ideal para los gamer

Al otro lado del planeta, los deportes electrónicos son igual de serios que los deportes tradicionales. El máximo exponente de esto es Corea del Sur. Sus proplayer son más influyentes que cualquier otro deportista.

Incluso el Ministerio de Deporte, Cultura y Turismo creó la Korean e-Sports Association, que lleva más de 16 años regulando y promoviendo sus deportes electrónicos.

Por su parte, los equipos tienen hinchadas propias y millones de seguidores que repletan los coliseos fecha a fecha. Las empresas privadas también aportan lo suyo con auspicios y algunas universidades becan a los mejores para que puedan estudiar y jugar sin problemas. ¿Qué tal?

Nada que envidiarle a otros deportes profesionales

Riot Games fue la empresa gringa que hace algunos años creó League of Legends. Son como la FIFA, teniendo oficinas en una cachá de países, incluido el nuestro.

El tema es tan profesional que en sus oficinas de Las Condes se juegan semanalmente las fechas del campeonato. Las finales siempre se hicieron en el Movistar Arena, menos la de este Torneo de Apertura.

En Frutillar, además de la final, Riot organizó un concurso de Cosplay y dispuso de varios ambientes donde los ñoños pudieron sacarse fotos, concursar e incluso tatuarse. Siempre trabajan en post de la buena experiencia de todos sus jugadores, que además son sus seguidores.

"Nuestra preocupación es dar un tremendo contenido y una tremenda experiencia a nuestros jugadores. Siempre nos preocupamos de que existan comportamientos positivos dentro del juego, que se generen lazos, amistades y que eso se autocontrole", la tiró Mathias Fernández, Country Manager LAS de Riot Games.

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