También existirían sospechas sobre la adulteración del sitio del suceso.
Nuevos antecedentes se dan a conocer en el marco de la investigación por el crimen de la subinspectora Valeria Vivanco, quien falleció el pasado 13 de junio tras recibir un impacto de bala en medio de un operativo policial en la comuna de La Pintana.
Luego que Fiscalía anunciara que se indagará una presunta obstrucción a la investigación por el homicidio, se dio a conocer que existió una demora en la entrega de pruebas balísticas por parte de la PDI al Ministerio Público.
Según detalló La Tercera PM, entre que se obtuvieron los resultados y se socializó la información pasaron cerca de 40 días. Esta situación ha hecho que la presunta obstrucción a la indagatoria pudiera incluso escalar a los altos mandos de la institución policial.
Informes
Hace algunos días llegaron a manos del fiscal de la Unidad de Delitos Violentos de la Fiscalía Sur, Christián Toledo, los informes policiales que abrieron nuevas dudas en torno al caso.
Uno de los detectives que acompañaba a la subinspectora en el operativo declaró ante el Ministerio Público que no había ocupado esa tarde su arma de servicio. Sin embargo, dio positivo a la prueba de nitratos.
Por si fuera poco, la munición alojada en el cuerpo de la víctima era compatible con las pistolas marcas Jericho que portaba en esa jornada el personal de la policía civil.
Con estos nuevos antecedentes, el Ministerio Público buscará dilucidar dónde estuvieron los peritajes balísticos durante los últimos 40 días y si existió una orden para dilatar su entrega.
Reconstitución de escena
El próximo lunes 9 de agosto se llevará a cabo la reconstitución de escena. En la instancia, participarán los tres funcionarios de la PDI que se encontraban junto a Valeria aquel 13 de junio.
Según sospechas de la fiscalía, los detectives estarían faltando a la verdad. Incluso se apuntaría a una remoción de evidencia del sitio del suceso.
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