Se trataba de uno 150 kilómetros de cableado de cobre que irían a parar a tierras asiáticas. La mercancía fue encontrada en el puerto de San Antonio.
La investigación partió en Antofagasta, cuando se detectó a un individuo, que representaba a una empresa exportadora de metales, que traía consigo 12 sacos de cables cortados de cobre.
El problema habría partido cuando no pudo justificar de dónde venía todo ese material, tras lo cual resultó formalizado por el delito de receptación, según consignó LUN.
Tras ello, las indagaciones llevaron hasta el puerto de San Antonio, Región de Valparaíso, donde un operativo de la Policía de Investigaciones (PDI) y Aduanas logró incautaran 12 toneladas de cable de cobre robado a empresas de telecomunicaciones.
Se trata de unos 150 kilómetros de cable de cobre, los cuales estaban almacenados en una nave atracada en el puerto. El contenido buscaba ser exportado hasta el puerto de Busan, en Corea del Sur.
“Venían declarada como chatarra de cobre, esto evidentemente significa una vulneración de las normas aduaneras, hay una falsedad documental de por medio, también habría un contrabando de exportación, y por supuesto que la lesión patrimonial que le causa esta acción ilícita al propietario de estas mercancías”, explicó el director nacional de Aduana, José Ignacio Palma.
Según las autoridades, la mercancía está avaluada en uno 100.000 dólares, es decir, en más de 80 millones de pesos.