Consternados e indignados quedaron los devotos del Cristo de la Gruta de Lourdes, cuando cacharon que la imagen del hijo de Dios había sido profanada durante la madrugada de ayer.

Los malandras aprovecharon la oscuridad de la noche para derramar pintura verde sobre el rostro, el pecho y las piernas de la imagen religiosa. De pasadita, y con la misma pintura, dibujaron una "X" sobre la oración que los fieles diariamente rezan en el lugar.

CURITA

Este es el cuarto atentado que sufre el Jechu del santuario. Pero lo sospechoso, según comentó el Padre Héctor García, párroco y rector del lugar, es que esta profanación se realizó en el mismo mes y "casi" en el mismo día en que se perpetró el último atentado a la sagrada imagen.

"Podría ser una acción satánica, porque los atentados se han realizado en una fecha que está muy cercana a la noche de San Juan", dijo el curita. Agregó que no pretenden cambiar de ubicación la imagen porque siempre han "querido que Cristo esté cerca de la gente, aún corriendo el riesgo de que su imagen sea profanada".

El padre Ramón Gutiérrez aseguró que la acción "no es sólo un atentado religioso, es también un atentado histórico".

"Sólo un enfermo de la cabeza puede hacer algo tan horrible", dijo triste una  feligresa.