Crónica de una muerte anunciada. Así se podría describir el actual momento que vive la otrora laguna de Aculeo, en la Región Metropolitana, que tal como se avizoraba, terminó completamente seca.
El lugar, que no hace muchos años permitía la práctica de deportes náuticos, es un franja de 12 km cuadrados de superficie resquebrajada por el sol, sin una sola gota de agua, un triste panorama que tiene varias explicaciones.
Quizás la más lógica es la evidente sequía que ha afectado a la zona, con un déficit de agua caída que nunca permitió normalizar los niveles de agua en la laguna.
Difícil panorama
El alcalde de Paine, Diego Vergara, reconoce que el panorama es desolador, y que desde hace un tiempo vienen trabajando con los regantes para intentar darle una segunda vida a la laguna.
El plan a corto plazo, según explica, es intentar desviar el agua de los canales que riegan sus campos hacía la laguna para empezar a recuperar de a poco su nivel.
"Estamos trabajando hace por lo menos siete meses. Partimos con los regantes y los agricultores para que nos faciliten sus aguas una vez terminado su año agrícola, porque ellos no riegan en invierno", indica.
- ¿La idea es llenar artificialmente la laguna?
Sí, queremos incorporar estos afluentes artificiales, que son canales de regadío, a la laguna de Aculeo, esto como medida a corto plazo. De hecho, hace tres días empezamos a meter un canal, que se llama el Aguilino, directo a la laguna. El plan es que todos los inviernos de aquí en adelante los agricultores nos puedan facilitar el canal cuando ellos ya no rieguen.
- Pero aquí la sequía jugó el papel más importante...
Así es, aquí lo más importante es que la lluvia es fundamental, no existe canal alguno que se pueda incorporar a la laguna si no llueve. La cuenca de Aculeo depende en un 100 por ciento de lluvias.
- ¿Y los regantes están comprometidos?
Sí, porque también pertenece a ellos. La laguna vacía afecta al turismo y la agricultura.
- ¿Qué tanto ha influido la construcción de condominios?
Acusan que los pozos de dichas casas habrían absorbido agua de las napas de la laguna. Cuando hay escasez siempre se busca una responsabilidad, pero nadie ve que la naturaleza no está aportando. Ocho años consecutivos hemos tenido una escasez de aguas lluvias.
Estudio
La problemática que aqueja a la cuenca de Aculeo también ha sido un desafío para las autoridades. En ese sentido el Gobierno Regional Metropolitano, aprobó un proyecto de $100 millones que será encabezado por la Facultad de Ciencias Forestales y de la Conservación de la Naturaleza de la Universidad de Chile, y que en el plazo de un año busca instalar equipos para registrar el nivel de la laguna, sus afluentes, aguas subterráneas y la pluviometría.
Además, revisará cuánta agua se necesita para recargar artificialmente la laguna con la ayuda de otros afluentes, como canales de regadío, plantas de tratamiento u otro acuífero que se encuentre próximo.
El profesor a cargo del proyecto, Pablo García Chevesich, cree que lo que ocurrió en Aculeo fue que "no hubo planeación territorial. El municipio autorizó el uso de la tierra sin considerar si había suficiente agua para hacerlo sustentable".