La encendida polémica por barrio rojo en Providencia

El concejal de Providencia, Jaime Parada, manifestó públicamente su molestia por la que a su juicio es la proliferación de los locales nocturnos y prostíbulos en su comuna.

Dijo representar la voz de los vecinos que estarían aburridos por las molestias que acarrean dichas actividades. "Tengo mucho contacto con juntas de vecinos del sector de Manuel Montt, y hace rato me manifiestan su preocupación por el aumento en el comercio sexual y la delincuencia, y eso hace mucho sentido respecto al tipo de barrio que se está configurando", explicó.

Parada añadió que detrás de su preocupación no hay ningún afán moral, sino que la necesidad de racionalizar lo espacios en la comuna. "Cuando tú pones muchos locales de un mismo tipo en un lugar estás dándole una configuración particular a un barrio y te arriesgas a matarlo como pasó con el barrio Suecia, que terminó transformándose en algo muy peligroso en el corazón de Providencia", aclaró.

"En un radio de 400 metros van a existir tres night club de un mismo concesionario y si no hubiéramos frenado esto, serían cinco en el mismo sector. Está el Club de Toby, el Passapoga y hay uno en Providencia #1411 (el Triple J), cuya patente está en disputa. Además, había otros dos que los paramos", acusó.

Escenario complejo

Sobre el particular, la alcaldesa, Evelyn Matthei, aclaró que la patente del "Triple J" la autorizó la administración anterior, y dijo que si le negaban el permiso el municipio debería incurrir en una indemnización millonaria.

Parada también arremetió contra la prostitución. "Si en un sector acotado comienzan a haber tres cabaret y además tenemos problemas de prostitución severos en edificios del mismo sector, que ya han sido hasta intervenidos por Carabineros, nos encontramos con que hay un problema de violencia, tráfico de drogas. Y no es culpa de las trabajadoras sexuales, sino que de quienes las explotan".

-¿Alguien podría encontrar pacata esa postura?

No. Tan poco mojigato soy, que estoy pidiendo que se cree un barrio rojo, no necesariamente ahí, pero que no sea lo que los empresarios de cabaret quieren. Tiene que ser un lugar acotado en la comuna, no sé dónde, para que se concentre ahí ese tipo de patentes para liberar otros sectores.

Vecinos

Mariana Ariztía vive en la calle Carlos Antúnez desde 1982 y es presidenta de la junta de vecinos 3A Plaza Jacaranda.

Manifestó que "el problema en sí es que al llenarse de clubes nocturnos tenemos el peligro de que esto se transforme en lo que fue Suecia en los años 90. Yo creo que antes de entregar una patente debería haber una consulta ciudadana y preguntarles a los vecinos en general, porque ellos no se enteran hasta el momento en que ya están funcionando estos locales".

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