Atleta antirracista y enemigo de Trump protagoniza su último spot, y las críticas han llovido.
Los fanáticos de Nike en el mundo, pero sobre todo en Estados Unidos, están divididos tras el estreno de la última campaña de la firma deportiva, donde se tomó la decisión de poner como uno de los protagonistas al atleta Colin Kaepernick, estrella de la NFL.
La historia de este astro del fútbol americano es súper llamativa, pues va más allá de una cancha de este deporte, en el que siempre destacó como uno de sus grandes exponentes.
Se cerraba el 2016, cuando Colin realizó un acto de protesta con el que dividió para siempre a los fanáticos: se arrodilló en medio del himno de Estados Unidos, como forma de evidenciar su descontento frente a la segregación racial.
Su osada maniobra le valió millones de loas, pero también duras críticas desde los sectores más conservadores del país norteamericano. De hecho, encima le cayó el propio Donald Trump, quien expresó su rechazo de forma clara y hasta lo mandó a vivir a otro país, a ver si por allá le iba mejor.
Según el atleta, que lleva dos años sin encontrar equipo después de su protesta, los dueños de los cuadros están complotando para dejarlo inactivo, y todo por temor al presidente gringo, juicio que está en proceso en EE.UU.
Y fue justo en este período oscuro en que Nike le propone a Kaepernick que sea parte de los deportistas de su última campaña de "Just Do It", la que incluye también a Serena Williams.
Con la frase "cree en algo. Aún si implica sacrificarlo todo", junto a un primer plano de su rostro, Colin aparece en las menciones, jugada publicitaria que no resultó todo lo bien que la firma hubiese querido, ya que las redes sociales se dividieron y las acciones de la marca cayeron un llamativo 3%.