Hace dos días un califa colombiano murió por consumir "Popper". El drama es que la droga sexual es de fácil acceso en Chile y, a pesar de que su venta es ilegal, se encuentra en algunos sex shops y vía internet.

Es un líquido que viene en frasquitos de vidrio. Al inhalarlo el corazón funciona más rápido y manda caleta de sangre al mate. Genera una sensación súper rica y prolonga el orgasmo, dicen. Pero una sobredosis puede ser mortal.

La "maravilla" es popular entre los gays, porque también relaja los músculos y así duele menos, cuentan.

El Instituto de Salud Pública pidió que la corten con el consumo, porque el breve placer que generaría no se condice con los peligros que acarrea.

No se le vaya a ocurrir mezclarlo con Viagra. Sería un pasaje seguro al patio de los califas callados.