"También debemos sancionar a los delincuentes y violentistas que tanto daño causan con todo el rigor de la ley", sostuvo el mandatario.
Durante la jornada de este lunes, el Presidente Sebastián Piñera analizó lo que fue el primer aniversario del estallido social.
En su intervención, el jefe de Estado habló de las multitudinarias manifestaciones pacíficas, los puntos específicos de violencia, y también agradeció el trabajo de las policías y las Fuerzas Armadas.
"Decenas de miles de chilenos se manifestaron pacíficamente, lo que constituye un legítimo derecho en un país democrático (…) pero también vimos una minoría de delincuentes que desató una ola de violencia, saqueos y vandalismo, incluyendo el incendio de dos iglesias de alto valor histórico y patrimonial, ataques a comisarías y destrucción de patrimonio público y privado", sostuvo el mandatario.
Tras ello, cifró en 107 los eventos violentos registrados a lo largo del país, que dejaron 643 detenidos por parte de Carabineros y la PDI, lo que significó 188 carabineros y policías lesionados.
"Esta acción criminal debe ser condenada por todos los que creemos en la democracia y queremos vivir en paz y debemos condenar no solo a los que la ejecutan, sino que a aquellos que de una u otra forma la justifican", añadió.
Cacerolazo
"No basta con condenar la violencia. También debemos sancionar a los delincuentes y violentistas que tanto daño causan con todo el rigor de la ley", agregó.
Sobre el final, un grupo de manifestantes inició un cacerolazo en medio de su discurso, lo que continuó hasta el espacio donde el Mandatario respondió preguntas de la prensa.
Finalmente, el mandatario hizo un llamado a participar del plebiscito de manera segura y responsable.