Asaltante entró a la mala a una sucursal bancaria en Independencia. Llegó hasta el GOPE, por posible toma de rehenes. Luego de un rato, cacharon que el ladrón no estaba.
Dicen que la realidad supera a la ficción y eso fue justamente lo que pasó en Independencia. Sucede que a las dos de la tarde un solitario ladrón decidió que era buena idea entrar a una sucursal del banco Santander, ubicada en Aníbal Pinto con Independencia, cerca de la hora de cierre.
Según antecedentes policiales, la jefa del local cachó que algo raro pasaba en la entrada, al ver que un individuo, que llegó desarmado hasta la sucursal, forzaba su entrada justo cuando cerraban las puertas del lugar.
Al entrar, forcejeó con el guardia privado, quitándole el arma. Todo esto a vista y paciencia de los clientes y trabajadores que a esa hora estaban en el banco.
Como en las películas, al toque la jefa alertó a personal de la SIP de la comisaría del sector.
Mientras carabineros iban camino al lugar, el ladrón intimidó a las personas presentes para acceder a la bóveda, lo que no habría conseguido.
Y si ya parecía película de Bruce Willis, al más puro estilo de "Duro de Matar", la cosa se puso aún más irreal cuando llegaron los verdes.
Escape. Tomando todas las precauciones del caso, la policía realizó un procedimiento para la liberación de rehenes. Luego de más de media hora, decidieron entrar al banco y se dieron cuenta que el delincuente se había hecho humo. Ni "El Profesor" de "La Casa de Papel" habría armado un mejor plan de escape.
El general de Carabineros, Enrique Monrá, explicó después qué fue lo que sucedió: "El sujeto amenaza y le quita el armamento al vigilante y posteriormente le pide que le abra la bóveda y algunas oficinas. En ese momento se produce un desorden, la gente se altera y aparentemente la persona arranca del lugar. Hasta el minuto no tenemos conocimiento a priori que se haya sustraído dinero desde la bóveda o desde las cajas".
Agregó que "la primera información que manejábamos es que esta persona se había encerrado al interior de una oficina, por tanto se pidió al equipo negociador y también a un equipo del GOPE, quienes ingresaron. Posteriormente salió una cantidad de personas que estaba al interior, que son empleados del banco, y luego se ingresó a la oficina donde se tenía la sospecha que podría haber ingresado esta persona y no se encontraba en el lugar".
Tras cachar que el asaltante no estaba en el banco, se pudo comprobar que el individuo se llevó el arma del guardia, que le quitó al ingresar a a la sucursal.
Tras el intento de robo, la PDI tomó el caso e investiga el paradero del solitario ladrón.