El dispositivo del vuelo fue rescatado por investigadores de Nueva Zelanda.
El vuelo LA800 que iba desde Sydney, Australia a Santiago, Chile, donde en pleno trayecto se registró un “incidente técnico” que originó turbulencias, desató el pánico al interior de la cabina. El suceso del repentino descenso causó 50 heridos, quienes fueron atendidos en el aeropuerto de Auckland, en Nueva Zelanda.
Ahora se ha dado a conocer que la aerolínea LATAM reveló que se reunieron con las autoridades respectivas para lograr determinar qué ocasionó el fallo “técnico” del Boeing 787. Así, con investigadores de accidentes en Nueva Zelanda entregaron informaciones sobre la recolección de evidencias, tanto de grabadoras de voz como los datos de vuelo de la cabina, según la información recabada por France 24. Claro que un portavoz declaró que “la investigación corresponde a Chile”, de acuerdo al citado medio.
El problema apuntó a la empresa Boeing, tras diversos fallos y contratiempos por la fabricación de sus aviones, que al mismo tiempo han puesto en duda la seguridad en sus transportes.
Los detalles sobre los pasajeros del complejo vuelo
Verónica Martínez, administradora de ventas, contó a la agencia de noticias AFP, su sensación en el vuelo, cuando se detuvo y luego se “desplomó”. “La gente estaba volando, bebés cayeron, fue horrible, mucha gente quedó herida”, relató.
LATAM, en un comunicado explicó que en el interior del Boeing habían 263 pasajeros y nueve trabajadores, parte de la tripulación. A causa del incidente “10 pasajeros de nacionalidades como Brasil (2), Francia (1), Australia (4), Chile (1) y Nueva Zelanda (2), además de 3 miembros de la tripulación, fueron llevados a un centro médico para analizar su estado de salud”, señalaron en su escrito.
“Sólo un pasajero y una tripulante presentan lesiones que requieren de atención adicional, pero sin riesgo vital”, confirmaron en las mismas líneas.
La aerolínea dio a conocer que los pasajeros partirán esta noche (en hora local) en su destino a Santiago.
Se investigarán las razones
En Santiago, la Dirección General de Aeronáutica Civil de Chile (DGAC), indicó que “será investigado por la Comisión de Investigación de Accidentes de Nueva Zelanda”.
En conversación con AFP, el experto en seguridad aérea, Joe Hattley, anotó que estos problemas técnicos no suceden habitualmente en aviones modernos. “El registro de vuelo será clave para entender el suceso. Dirá a los investigadores si fue un fenómeno atmosférico o un problema técnico con la aeronave”, explicó. También hizo la advertencia de mantenerse a lo largo de un viaje con “cinturones abrochados”.
A través de un comunicado, la empresa Boeing declaró que: “Estamos trabajando para recoger más información del vuelo y suministrar cualquier apoyo necesario” y que “está listo para apoyar actividades relacionadas con la investigación conforme se le solicite”.