Mil caballos, cinco mil invitados y representantes de 18 países se dieron cita en el Castillo de Windsor para celebrar los 60 años que lleva la Reina Isabel sentada en el trono de Inglaterra.
Y como la afición de la monarca por los equinos y los viajes por el mundo es conocida, sus regalones le organizaron el espectáculo “Alrededor del Mundo en 60 años y 90 minutos”, donde Chile fue el representante de Latinoamérica.
El encargado de dar la cara por nuestra nación en las tierras inglesas fue el mismísimo ministro de Relaciones Exteriores, Alfredo Moreno, quien recién hace un par de días conoció a la Reina Isabel en persona, tomando té en uno de sus aposentos.
“Ella me dijo que le gustaron mucho los caballos chilenos, pues son más pequeños, dóciles y hábiles. Además le llamó la atención que tres de mis hijos participaran del espectáculo”, contó el canciller con orgullo.
El entrete show se realizó ayer en Londres tras una pirula cena formal, y la reina vio desde el palco el espectáculo que protagonizaron caballitos del criadero “Palmas de Peñaflor”, que bailan junto a sus jinetes y acompañantes.
Los distinguidos equinos fueron llevados en avión desde Chile a Inglaterra, y todos los jinetes son compatriotas que se lucieron zapateando en los jardines de Windsor.
Con el pecho como palomo, el ministro Moreno relató que este fue el único espectáculo, de todos los que ya se han hecho en su honor, al cual asistió la Reina. “Ella tiene muchos caballos, de distintas razas”, copuchó el canciller.
NOS DEJÓ UN CHURRÍN REAL DE RECUERDO
Fue en noviembre de 1968 cuando la reina Isabel y su esposo, el príncipe Felipe, visitaron Chile bajo el gobierno de Eduardo Frei.
Lo que sería una visita de Estado tuvo un breve espacio para el relajo, pues los días 15 y 16 la pareja real se fue a Pucón, donde las anécdotas no estuvieron ausentes.
Tras el pique, la nodriza de Isabel no encontró nada mejor que regalarle un churrín de la reina al piloto de la Fuerza Aérea que la llevó al sur. La ropa interior fue hecha a mano en fina seda, con encajes bordados y botones de madre perla, lleva sus iniciales y actualmente está avaluado en 15 mil dólares.