Leonardo Farkas continúa dejando la mansaca en Viña. Ayer, se robó la película en el cóctel que la Muni de la Ciudad Jardín ofreció a sus organizaciones sociales.
Fue cosa que el chasca llegará en su limusina negra al Palacio Rioja, para que quedara la grande. No alcanzó a poner una patita en el piso cuando fue acosado por las cerca de 300 almas presentes: Lo saludaron de mano, le dieron besos, se sacaron fotos con él y no faltaron los zánganos que le pidieron que se rajara con un buen billete, pero él se hizo el loco con el tema.
PIRINOLA
Era tanta la esférica que la gente y la prensa le daba a Farkas, que nadie inflaba a Sole Onetto y Felipe Camiroaga, quienes trataban sin éxito de darle algo de orden al evento.
En un momento la cosa se puso tan bulliciosa, que la parejita que esta noche debutará en la Quinta le pidió al jurado que se subiera al escenario para que la cosa se calmara y pudieran continuar con la ceremonia.
Al final vino el bailoteo. Los acordes de música cumbianchera latina más prendieron al "invitado de honor". Fue cosa que se acercara una abuelita para invitarlo a bailar, para que él aceptara y se moviera como pirinola, demostrando que cuando hay que divertirse, se divierte sin atados.
"El cariño que me entrega la gente es la mayor riqueza que tengo en estos momentos", comentó a la prensa Farkas al irse del lugar. "Ver a estas señoras contentas, me hace el hombre más feliz", remachó.
Angélica, que bailó con Farkas, le tiró puras flores al millonario: "Es simpático y caballero. Se mueve muy bien, especialmente el trasero y se nota que sabe disfrutar de la vida. Es todo un galán".
