El brasuca tomó un segundo aire y hoy lo pasa chancho. Además, hace un par de meses creció su familia, así que está con el babero.
Al meterle el lápiz pasta al cassette cerebral y empezar a rebobinar la memoria pelotera, altiro aparece el nombre de Robinho al buscar a los principales verdugos que hemos tenido en la historia. Es que ahí el grone se maneja. Calcule que cuando la sudó por la Verdeamarela, el delantero clavó nueve veces a la Roja.
La última vez, por cierto, fue en noviembre de 2013 (con el pitillo de Don Sampa en la banca), en un amistoso jugado en Toronto. Ahí el brasuca marcó a los 79’, pero lejos de ser una anécdota más, ese tanto lo transformó en el máximo pichichi ante Chile, superando a Pelé, que alcanzó 8.
“Siempre me va bien ante ellos”, comentó en una ocasión, pero además de prenderse ante una bandera tricolor (como cuando pidió respetar a la “mejor selección del mundo”, a raíz de la portada del “koala” de La Cuarta), Robinho también es eficiente ante equipos jaguares. Para muestra, los dos pepones a la “U” en el 2005, por la Libertadores.
Claro, el tiempo pasa, algunas cosas bajan y otras cuesta más que suban, pero el instinto asesino de Robson de Souza no se acaba. Y eso lo saben bien en el Cacique, que recibirá este jueves al Mineiro con el antecedente de que su joyita marcó tres tantos en la última fecha del Campeonato Estadual de Minas Gerais.
“No están jugando con rivales de jerarquía, salvo Cruzeiro. No hay que tomar una vara tan alta y pensar que es un equipo que no se puede doblegar. Robinho es un jugador extraordinario, pero nosotros también tenemos a un jugador de selección, que es Jean”, contó a ADN el defensa Julio Barroso.
El punto es que, con 32 años, el delantero brasuca está gozando el “segundo tiempo” de su carrera. Y ni hablar de la plenitud en su vida personal. Así ha quedado demostrado en su álbum familiar, donde guarda “trofeos” con Pelé y Neymar (que es ídolo de su hijo mayor, Robson Jr), además de mostrar las calugas y su fashionista manera de “acicalarse”.
Capítulo aparte merece su historia de “amorsh” con Vivian Guglielmetti, con quien contrajo matrimonio en 2009, luego de 11 años de pololeo. Sí, después del ruliento Robson llegó su fotocopia Gianluca, y en julio del año pasado nació la regalona, Giulia.
¿Qué más puede pedirx?x La Copa Libertadores no estaría nada mal. Y, por lo mismo, es clave ganar en la Ruca. “Fuera de casa no hay partido fácil. Además, hemos hablado que Colo Colo impone una fuerza física muy grande, pero estamos preparados. Iremos a buscar la victoria”, cerró canchero Robinho.