Rojos de plancha por robo a Marc Anthony

Una imagen de Chile como el loly pop de piure se tiene que haber llevado el cantante gringolio Marc Anthony.

Tras celebrar a tablero vuelto sus tres shows en el Arena Santiago, el calambriento marido de la voluptuosa Jennifer López fue víctima del ordinario choreo de su celular.

Por culpa de estos agilados tenemos fama de  ladronzuelos en el extranjero: El robo llenó páginas de diarios foráneos.

Según la policía, el jueves, cuando estaba listo para viajar a Baires, el intérprete de "No me ames" cachó que no estaba su blackberry 8000.

El aparato contiene los fonos de René de la Vega, Cristóbal, Rodri Eitel, Six Pack y Juan Antonio Labra,   entre otros astros, y está avaluado en 400 gambitas.

Justo cuando le dieron ganas de llamar a su negrita enjundiosa, el flaquito con así el billete cachó que su celu había desaparecido. Desesperado, le pidió a sus gomas que lo buscaran hasta en el guáter.

El salsero casi se va de espalda cuando uno de sus gorilones le contó la pulenta: Un flaitito pedía 15 palos por el equipo.

PASTELAZO

Cerca de las 22.40 horas del viernes,  Raúl Eduardo Silva Osorio (30), funcionario de mantención y equipos eléctricos de Arena Santiago, llamó a  Wilson Enrique Lisboa Paredes, miembro del staff de Marc Anthony, y le exigió 15 palos para devolver el teléfono.

Lisboa avisó a Policía Internacional y acordó con el vivaracho reunirse en el metro Estación Central. El cuma fue detenido justo antes de que se concretara el trueque.

Silva le aseguró al fiscal Maximiliano Krause que no robó el blackberry, sino que lo había comprado a otro sujeto por 160 lucas.

Añadió que se enteró que el cachivache pertenecía al intérprete de "Ahora quién" tras recibir varios llamados y mensajes de texto desde Estados Unidos.

Explicó que un colega de pega se lo vendió en la estación del Metro Parque O'Higgins.

RATONIL

Silva, quien no tenía antecedentes penales, fue formalizado por receptación de especies.

Lo charcha es que el magistrado del Octavo Juzgado de Santiago, Eduardo Váquez, lo dejó libreta. Igual no  se las llevó peladas, ya que tendrá firmar cada dos meses y realizar trabajo comunitario por 120 días.

La Cuarta intentó comunicarse con Ignacio Plaza,  del staff de Arena Santiago, pero nadie respondió.

Felipe González V.

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