Los miembros de la selección de Internos de la ex Penitenciaría de Santiago esperaban con ansias enfrentarse al equipo de futsal de Brasil. Comandados por el Ronaldiño de la Calle 13 ayer cumplieron su sueño y golearon a los brasucas con un abultado 12-3.
Raúl Escobar (24) cumplió el sueño del pibe: Golear, ganar y gustar.
Acostumbrado a moverse en espacios reducidos, el "Ronaldiño" se transformó en el rey del metro cuadrado y dejó locos a los seleccionados garotos, onda que les robó la pelota en los momentos clave del partido.
El ídolo de los reos, que cumple condena por robo con intimidación, es tan bueno que llegó a jugar en las cadetes de Colo-Colo antes de delinquir y caer en la jabonera.
Con una exquisita técnica, llena de gambetas y amagues, le dio una alegría a la barra canera y rompió la insoportable rutina del día a día tras los barrotes: El compadre marcó cuatro de los 12 pepazos que el team de camiseta rayada le propinó a los garotos de "Ambassadors in Sport".
"Mi sueño era ser jugador. Acá en la cana el fútbol es un sedante. A uno lo saca de la rutina carcelaria. El deporte hace bien y este partido es una experiencia súper buena. Agradezco al equipo de Brasil que vino a entretenernos", señaló el goleador.
Con una larga pretemporada de 8 años y un día, el crack guaripoleó al quinteto integrado por "El Cogollo", capitán del equipo; José Caviedes "El Manquehue"; "El Indio" y el "Araña negra", en el arco.
El Ronaldiño "Canucho" se mostró tan hábil y veloz que no lo pillaban ni los gendarmes. Otras de sus joyitas en la cancha fueron los túneles que les hizo a varios brasucas, claro que destiñó en los tiros "libres".
La selección de la Peni pasó por encima de los brasileños, que de buena voluntad quisieron jugar en el óvalo de la cárcel para darles un momento de recreación y felicidad a los reos chilenos del Centro de Detención Preventiva Santiago Sur (ex Penitenciaría). Al final sólo pudieron marcarles tres pepas a los presos chilenos, pero se llevaron el cariño de toda la gallada.
"Nosotros hemos sido 5 veces campeones del mundo. Pero de qué sirve si uno no es campeón de Jesucristo. Ojalá que con todos estos hermanos chilenos podamos campeonar en el cielo", señaló Valmir, el capitán de los garotos que militó en el fútbol profesional hasta el 2000.
"Estoy agradecido de los brasileños porque esto nos distrae la mente. Ojalá se arregle la situación penitenciaria, porque acá somos 5 mil reos que merecemos que nos traten como seres humanos", dijo el capitán "Manquehue".
Al final, los leones de la Peni le regalaron el triunfo a su público cautivo.
COPA "ESTOQUE DE ORO" SE MIRA Y SE TOCA
El pleito futbolero organizado por Gendarmería de Chile en conjunto con "Embajadores del Deporte" tuvo puros ganadores. Por un lado, los reclusos de la ex Penitenciaría, que gozaron de una mañana súper entretenida, y por otro, los brasileños que se llevaron un camión cargado con agradecimientos de los reos.
El trofeo, una espada tallada en madera, fue sólo una excusa para compartir.
"El deporte une a las personas. No tiene religión, fronteras ni razas", dijo el alcaide de la ex peni, coronel Nelson Soto.