El único momento donde Ruperto Hidalgo (72) no está pa’ los mandados es cuando llega a su casa a las nueve de la noche.
El resto del día lo pasa metido en plantas de revisión técnica haciendo su particular pega: llevar autos de un lote de compatriotas cómodos que dejan para última hora el tedioso trámite de la revisión técnica.
“Hace dos años me jubilé y se me ocurrió esta idea porque vi que las personas perdían mucho tiempo en eso. Pero no es lo único que hago, también pago los partes de las personas, hago las colas para sacar los papeles del permiso de circulación”, contó.
El tatita, que lo único que falta es que les lave el coche, reveló que no se hace atados en pasar horas y horas con su delantal y gorro, su indumentaria de trabajo, soportando el sofocante calor del verano: “Tengo todo el tiempo del mundo. Además, tengo que aprovechar que esta época es una locura. Llevo a las plantas hasta cuatro autos al día”.
El hombrón más manduqueado de nuestro país, que desde las siete de la mañana ya está laburando, les sacó la foto a los chilenos. Soltó que “los chilenos son re buenos para dejar todo a última hora. Todos afligidos, porque se van de vacas y están atrasados en los trámites”.
Por su trabajo cobra una UF por auto, pero en caso que la familia o empresa tenga más de uno, le saldrá 0,8 UF.
“Si es un permiso de circulación, cobro quince lucas”, aseguró.
-Oiga, pero parece perkin haciendo tantos pedidos.
- Así es, y no tengo problemas en asumirlo. Total, toda la plata es para mí. Además, alguien tiene que hacerlo.