Ya son tres las familias nortinas que han denunciado a esta mujer, quien en cada ocasión ha usado el mismo modo de operar.
Tendría entre 30 y 40 años, y se trataría de una mujer oriunda de Bolivia. Familias nortinas, de Calama y Antofagasta, acusan en se hace pasar por asesora del hogar para drogarlos y así robarles sus pertenencias tecnológicas.
La calameña María Isabel Díaz asegura que, en busca del reemplazo “indicado”, según informó LUN, la elegida fue Maritza Zambrano, quien arrancó con sus labores el 28 de julio.
Díaz se encontraba convaleciente de coronavirus, así que la mujer le ofreció un reponedor jugo de naranja. “A los diez minutos empecé a sentirme muy cansada y mareada”. Ante eso, se acostó y despertó cuatro horas después, y Maritza ya no estaba. “Nos robó todas las cosas tecnológicas que teníamos en la casa”, contó, “que deben ser unos $10 millones”.
Es más, denunció, “incluso tomó mi mano para desbloquear con la huella digital algunos aparatos”. Las cámaras de seguridad afuera del hogar muestran a la mujer cargando, con esfuerzo, un bolso y una maleta.
Otro caso
Un caso similar vivió días después el antofagastino Carlos Burgos, según el citado medio. La nueva asesora del hogar se mostraba amable y servicial.
Ese día, la pareja del hogar dejó a sus niños en el colegio y luego volvieron a casa. En ese momento, ellos querían pedirle la documentación a la nueva empleada con el fin de cerrar su fichaje.
Sin embargo, relató él, “ella insistió en que tomáramos desayuno, así que lo hicimos”, para luego de eso revisar los papeles. Antes, la mujer llegó con unos huevos revueltos y té. “A los veinte minutos mi esposa empezó a ver borroso y fue a acostarse”, contó. “Subí a verla, la abracé y me fui a negro”.
Despertaron al mediodía y “Maritza había robado rodas las cosas marca Apple”. En el termo de agua caliente, había restos de un polvito planco. Los exámenes toxicológicos estarían durante los próximos días.
En total, según consignó Buenos días a todos (TVN), son tres las familias que han denunciado haber sufrido este delito por parte de la presunta ladrona, quien suele ocupar gorro y mascarilla para ocultar su rostro.
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