Un pastel que se encontraba bajo los efectos del trago y la droga retuvo durante una hora a su ex pareja, la agredió bestialmente y luego amenazó con hacer estallar un balón de gas licuado.
El tete de violencia intrafamiliar se produjo la mañana de ayer en la pobla Granadillas, en Viña del Mar, luego que Demise Navarrete (30), quien abandonó el penal Colina 1 en noviembre pasado, llegó a casa de K.B.L.R (28) a dar jugo.
Tras una agria discusión, el bruto golpeó con pies y puños a la mujer y le propinó cortes en diferentes partes del cuerpo.
La afectada llamó a la policía, que debió parlamentar una hora con el enajenado, quien se puso la manguera del balón de gas en la tarasca, para que se entregara.
Debido al peligro, parte del conjunto habitacional debió ser evacuado por Carabineros y la Defensa Civil.
Tras una peluda negociación, Navarrete depuso su actitud y se entregó a efectivos del Equipo de Reacción Táctica de la PDI. Ahora enfrenta cargos por secuestro con resultado de lesiones.
La víctima fue trasladada al Hospital Gustavo Fricke, donde tras la curación de sus heridas se le dio de alta y pudo regresar a su hogar.