"Señor de la Perrencia" arrienda fieras para que muestren dientes en casas solitarias

Aburrido de gastar camionadas de plata en pellet, levantar kilos de bosta y no recibir ningún beneficio, Andrés Deramond (40) decidió darle un novedoso uso a sus animalitos: Arrendarlos a dueños de casa que quieren resguardar sus valiosas pertenencias cuando salen o  andan de vacas.

Los animales que lo acompañan en el pionero negocio inspiran más julepe que el "Cancerbero", ese cachupín de tres cabezas y colas de serpiente que cuida la entrada de la casa del cola de flecha.

El "Tyson" es un rottweiler negro de 7 añitos, capaz de pulverizar una retroescavadora e incluso un pan añejo de un solo tarascón.

La otra fiera es "Fila brasileño" y se llama "Chico", pero no se engañe con el nombre. Con sólo 11 meses es capaz de colgarse a una presa y no soltarla nunca más en la vida. Es tan feroz que los perros grandes le dicen "amo".

La Pyme lleva dos semanas de vida, pero a Andrés ya le llueven los pedidos de compadres chatos de la delincuencia, abuelitas que quieren dormir en paz mintras están de vacas y cachudos que juran que por las noches entra el chiflón por la rendija del dormitorio matrimonial, a pesar de que no hay nadie.

AMORES

Andrés es fanático de los perros  y los tiene bajo su cuidado desde hace once años.

La idea se le ocurrió cuando llevó al "Chico" a cuidar una parcela en construcción, que tenía caleta de herramientas valiosas en el suelo para llegar y llevar.

"Llevé al canino en la noche y lo dejé solo. La parcela sólo tenía una pandereta y un portón, por lo que era la papa sacar algo", recuerda el dueño.

Al otro día fue a buscar al cachupinazo, pero su séptimo sentido le avisó que algo andaba mal.

La puerta del portón estaba abierta. Habían forzado el candado y arrancado la cadena protectora.

Cuando entró no faltaba ni una máquina. El can estaba sentado en sus patas traseras, con la vista al frente y levantando la jeta en señal de alerta. Junto a él había un zapato pelado. Hasta hoy se desconoce el paradero del dueño.

Al ver la escena, Andrés tuvo una visión. Había creado un sistema de seguridad inviolable, mejor que un guardia, cámaras de vigilancia, botones de pánico, cables de alta tensión y alarma remota.

"Cuando traslado a los perros es un verdadero show, porque apenas me los puedo. El rottweiler es más tranquilo, pero al 'Chico' le gusta pelear con los demás. Son súper bravos", advierte el adiestrador antes de tomarles una fotografía.

- ¿Cómo es el sistema?

- Se ponen de acuerdo conmigo para el día que necesiten al cuidador. Antes de que la gente salga, suelto los perros. Hago monitoreo dos veces al día y les llevo comida y agua.

- ¿Es muy difícil adiestrarlos?

- Esa es la gracia. Estos perros no están amaestrados. Deben ser lo más 'brutos' posibles para que sean buenos cuidadores y no les hagan alguna artimaña para engañarlos.

- ¿Le alcanza con dos mastodontes?

- Hasta ahora, sí. Pero a corto plazo queremos incorporar a un Pitbull.

- ¿Cómo hago para arrendar?

- Tiene que llamarme al celu 9-221 0441. Por sólo 20 mil pesos al día su casa estará segura.

Claudio Sanz S.

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