"App" permite llevar un control del comportamiento alimenticio de los menores en la cafetería del colegio: avisa qué compran, cuánto gastan y usted puede poner especificaciones y tope a todo.
A los papás les encantaría tener algún superpoder que les permitiese estar todo el día pendientes de lo que sucede con sus hijos, aunque estén a kilómetros de distancia. Pero como eso no existe ni en Marvel, de a poco la tecnología se ha transformado en un gran aliado.
Distintas aplicaciones son muy útiles para estar cada vez más encima de lo que ocurre con los menores, aunque claramente no siempre se consigue del todo.
Y entre las cosas que más desespera a los progenitores no poder tener bajo control está la alimentación. Con números preocupantes a nivel país, como los que publicó Junaeb hace unos días, que indican que el 23% de los escolares presenta algún grado de obesidad, evidentemente poner ojo en este ámbito se hace imperativo.
En ese sentido, un buen apoyo es la "app" "SoftCafetería", la que se implementará en algunos establecimientos educacionales en este año académico, y que permitirá a los padres estar muy al tanto de lo que sus hijos consumen durante las horas que pasan fuera del hogar.
Funciones
Este software tiene una interfaz muy sencilla, su uso es simple y cuenta con bastantes características muy útiles no sólo para los apoderados, sino que también para los dueños de estos negocios instalados en los colegios.
Por medio de una tarjeta, la que se va recargando con saldo igual que si fuese una Bip!, pero a través de un depósito que realizan los padres, los alumnos llegan hasta el local de venta de alimentos y pagan sin necesidad de tener efectivo, lo que es muy seguro.
Además, todo está interconectado de manera tal que cuando el niño realiza una compra en el establecimiento de inmediato le arroja una alerta al smartphone del padre, quien se entera en línea de qué compró y cuánto gastó en su colación.
Y como lo ideal es mantener un control de la alimentación saludable de los pequeños, de antemano se puede establecer una lista de cosas que los menores tienen permitidas comer, y otras que por ningún motivos les pueden comercializar, ya sea por un tema nutricional o porque sean intolerantes o alérgicos a algún compuesto.
Otra de las cosas que se puede dejar clarificada es el monto máximo que un niño puede gastar como límite diario, información que aparece por pantalla apenas el menor se presenta ante el vendedor con su nombre y RUT.
"Enfocamos esto en nuestros hijos y las futuras generacionesde Chile como una solución que nos permite empoderar tanto a los apoderados, como a los encargados del servicio de alimentación del establecimiento, en ofrecer un control necesario y dar así un mejor servicio y cuidado a cada niño", aseguró Sebastián Bravo Hadad, gerente general de Alphatec Solutions, empresa representante de "SoftCafetería" en Chile.
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