Quizás muchas veces ha escuchado hablar de los probióticos y sus pulentos beneficios para la salud. Pero, ¿sabe qué miércales son y para qué sirven?
Los probióticos son microorganismos vivos que forman parte de nuestra flora intestinal, y tienen la tarea de regular algunas funciones del organismo.
Sin embargo, el estrés, el sedentarismo y comer mal son factores que disminuyen la cantidad de bacterias que nuestra máquina necesita para funcionar tiquitaca. Como consecuencia, aparecen problemas como diarrea, estreñimiento, hinchazón, dolor de guata y cabeza,
En el mercado hay un montón de productos con probióticos que, suministrados en dosis adecuadas, aportan varios beneficios a la salud, como la capacidad de regular la flora intestinal y estimular el sistema inmunológico. Estas propiedades hacen que las también llamadas bacterias “buenas” sean útiles para combatir el tránsito lento y cuadros diarreicos en niños y adultos, pues ayudan a mantener el buen funcionamiento del intestino y a proteger el organismo de achaque e infecciones.
Los más comunes son los lactobacilos y bifidobacterias, que se encuentran en lácteos, vegetales, carnes y pescados. Los primeros ayudan con la digestión, el tratamiento de la diarrea por culpa de los antibióticos y prevenir las bacterias que causan la Escherichia Coli y Salmonella.
En tanto, las bifidobacterias producen ácidos que ayudan a equilibrar el nivel de pH en los intestinos, reduciendo el tránsito lenteja, además de limitar las bacterias que producen nitratos, causantes de enfermedades como el cáncer.
Francisca Vallejos, nutricionista de Bioticaps, recomienda que para que los efectos de los probióticos sean favorables y duraderos, es necesario ingerirlos de manera regular y continuada.
