Las sílabas se clasifican por el acento en:
Tónicas o fuertes: aquellas que se pronuncian con mayor intensidad porque recae en ellas el acento principal.
Ejemplos
man-sión
ca-pa
pó-ci-ma
Átonas o débiles: las inacentuadas, pronunciadas con una menor intensidad. Casi todas las palabras, analizadas individualmente, tienen un acento que puede aparecer en una de las cuatro últimas sílabas, siempre que sea polisílaba, e incluso en el caso de que tenga una sola, ésta es fuerte.