Regina Burgos y Harold Núñez son amos y señores en el Sobreruedas. La pareja hace 14 pepas que son los capos de la cocina en el MerSan, de la comuna de Lo Espejo. Ambos cocinan y junto a un equipo de personas atienden siempre el local. “Comenzamos en un kiosko, en una esquina, ahí estuvimos casi dos años y como fuimos creciendo demasiado, la administración del MerSan nos pidió que nos fuéramos o nos cambiáramos a un restaurante, así que de alguna forma ellos nos impulsaron a llegar acá”, largó la señora Regina, quien también es fan acérrima de Marco Antonio Solís: “No me he perdido ningún concierto”, aseguró mientras compartimos un charquicán que hace recordar los platos de la abuela.
“Tuvimos la gran fortuna, ya que desde que empezamos tuvimos mucha clientela, porque llegaron los primeros mil cien buses del Transantiago que se armaron acá”, explicó la señora Regina.
Sobre la comida, les contamos que los platos son cototos y sabrosos, bien condimentados y de sabor casero. “Siempre hemos dado almuerzos contundentes y sandwichs grandotes, acá se hace todo: se filetea la carne, se muele, se corta y se prepara desde las empanadas hasta pastel de choclo”, juró la jefaza.
¿Y el menú? Es bien variado. Los lunes hay cazuela de ave o vacuno y legumbres acompañadas de longanizas de Chillán. Los martes pescado al horno o frito, los miércoles charquicán, fideos con carne o algo casero. Jueves, empanadas, pastel de carne y pollo asado y el viernes el rey es el pescado frito, infalible.
Su hijo, Felipe Burgos, trabaja con sus taitas y nos cuenta que en la noche también hay cena y que para los que quieren remojar el güergüero, el local cuenta con patente total de alcoholes, así que también se puede disfrutar de una regada sobremesa.
Sobre los precios, le contamos que los almuerzos, que incluyen, ensalada, sopa, jugo, pan pebre, fondo y postre, vale 3.700 pesos, mientras que la cena tiene un valor de 4.200 piticlines por persona.