Está claro que la valentía por vencer a un cáncer de mamas y hacerse un tatuaje van por carriles opuestos. Sin embargo, en los últimos años surgió un punto que los une para siempre...
¿En qué consiste? Les dibujan pezones. Hace un tiempo, los artistas de Daruma Studio Tattoo, capos a la hora de hacer feliz a tanto rockero fanático de estos dibujos en la piel, decidieron implementar este servicio para mujeres que padecieron la maldita enfermedad, la vencieron y se sometieron a una cirugía mamaria reconstructiva.
El tatuador Bastián Caniullán explicó la razón por la que esta tendencia llegó para quedarse: "Los pechos son un tema muy importante. Es lo que representa a la mujer en sí. Una me dijo que 'una crece con el estigma de las pechugas, se compara con sus compañeras o amigas'".
El propio artista agregó que las clientas que fueron a marcarse un botón mamario le confesaron tener un prejuicio sobre este tipo de arte. Sin embargo, el tiempo se encargó de mostrarles que no era así.
"Todas se ponen a llorar porque les da emoción volver a verse como antes del cáncer. Se sienten más seguras y su autoestima mejora", agregó Manuel Alarcón, diseñador gráfico y tatuador.
Su experiencia
Paula Fuentes es técnico financiero. No sufrió el cáncer mamario, pero sí perdió sus senos por otro problema de salud. Una vez que se hizo la cirugía reconstructiva decidió tatuarse. "Me siento con más confianza porque se ve natural. Esto llena el autoestima", contó feliz.
Para Mariela Campos, tatuadora y profesora de artes, "este tipo de trabajo es el término de un proceso para curar la enfermedad. Eso sí, no es una prioridad, porque es algo estético y en otros lados se aprovechan para cobrar caro".
Como los chiquillos de Daruma Tattoo Studio no tienen el signo peso en sus ojos, este trabajo lo realizan totalmente gratis. Por lo tanto, quienes deseen tatuarse seguridad, los pueden ubicar en sus redes sociales.