La venta de loteos irregulares o "terrenos brujos", como se conocen comúnmente, se ha masificado en los últimos años gracias a la proliferación de sitios dedicados a las transacciones y a la opción "market" de Facebook, donde abundan los avisos de predios.
Por ello, las 345 municipalidades de Chile se organizaron y firmaron un acuerdo para poner fin a al enriquecimiento ilícito de especuladores que se aprovechan del deseo de miles de personas de adquirir un terreno para construir la casa propia.
"Hoy estamos diciendo fuerte y claro que no queremos más abusadores que se aprovechen de la buena fe de la gente, que por desconocimiento compran terrenos esperanzados en la construcción de sus viviendas y no reciben título de dominio", dijo el ministro de Bienes Nacionales, Felipe Ward. Al comprar un "terreno brujo", según el artículo 138 de Ley General de
Urbanismo y Construcciones, no se puede:
- Construir una vivienda.
- Cercar una superficie definida.
- Instalar medidores de agua y luz independiente.
- Apoderarse de un retazo.
- Postular a un subsidio de vivienda.