El autor confeso del crimen del cabo Óscar Galindo tiene 17 años; el 22 de junio cumplirá 18 y en el hampa le dicen "Danielito". En octavo básico dejó los estudios para dedicarse de tiempo completo al delito, pero en el centro de internación provisorio de San Joaquín logró nivelarse y cursaba cuarto medio.
El mismo 2017 cayó por posesión de pasta base, cocaína, marihuana, con un chaleco antibalas, dos gorras de carabinero y una subametralladora Uzi con 30 cartuchos. Fue condenado por tenencia de arma prohibida y tráfico de drogas a 541 de libertad asistida, además de 30 horas de trabajo comunitario.
El "choro" de la población El Bosque, de La Pintana, a pesar de su corta edad (o posiblemente por las bajas penas que arriesgan los menores), no tenía problemas en apretar el gatillo y como daba, recibía, ya que el año pasado sufrió un balazo en el estómago en un enfrentamiento. El miércoles resultó con unos rasguños en la misma zona durante el tiroteo en que mató al cabo.
Dos balazos en la cabeza con una pistola glock 9 mm adaptada le propinó D.E.R.Y. al policía que intentó interponerse entre el enfrentamiento de dos bandas de narcos.
El joven fue identificado por su rival, Brayan Alvial (23), herido por "Danielito". El imputado, al verse cercado, se entregó la misma noche del crimen y cuando fue ingresado al Hospital del Salvador, para que le curaran el abdomen, demostró su violencia al intentar agredir a los periodistas que le preguntaron "¿por qué lo mató?".
Lo confundió
Entonces dijo que confundió a Galindo, que andaba de civil, con un sicario, y ayer en la mañana el imputado ratificó sus dichos cuando salía del OS9 camino al Centro de Justicia.
, dijo.
"Me equivoqué porque pensaba que era sicario, un sicario de otro lado, del (barrio) Franklin, (de) los colombianos. Me entregué voluntariamente", agregó.
"Le dispare a él porque me disparó de espalda, dos disparos, y yo pensaba que era un sicario, no andaba con uniforme y llegó y disparó", acusó el joven.
En el control de detención el fiscal Marcelo Apablaza lo acusó de homicidio de carabinero de servicio y de dos homicidios frustrados, porque atacó a Brayan Alvial y a un compañero del cabo Galindo.
En la audiencia se conoció la razón den enfrentamiento, y era la intención del imputado y de sus cómplices Pablo Soto Maturana (19) y Harri Prado Arrué (31) (ambos detenidos) de matar a Alvial por venganza.