- ¿Cuántas empanadas se comió el 18?
- Fueron dos días nomás, así que alcancé a comerme dos empanaditas con merkén, que estaban muy ricas.
- ¿Terremoto o chicha?
- Chicha, pero suavecita eso sí, y que sea dulzona.
- ¿Cuántos pies de cueca se mandó?
- A Dios gracia, en ningún lado me invitaron, porque yo soy un buen bailarín, pero de cueca "rara", no la brava. Tú sales, aprovechas que esté la gente amontonada para que no se note el detalle y el resto lo hace el entusiasmo.
- ¿Tipo Lagos Weber?
- No, un poquito más elaborada. Yo sé más o menos los pasos, el cepillado, el taconeo, el problema es que me enredo en que momento va cada cosa.
- ¿Y a cuántos desfiles le tocó ir?
- Fui a la Parada Militar en Santiago. Yo generalmente voy a la de Antofagasta, que es muy brava porque esa demostración de fuerza que se hace en el norte supera a la de la capital. Desde el punto de vista de los equipos que se muestran.
- El diputado Ceroni dijo que eran una lata los desfiles, ¿son tan así?
- A mí me gustan mucho. Yo, como soy del norte, de niño tenía que ir a las paradas, y lo veo como una acción muy solemne.
- ¿Dónde están las mejores fondas?
- Mira, la fonda para que tenga sabor tiene que estar en los lugares más populares, ahí está el Chile real.
- Y de las canciones dieciocheras, ¿cuál es la que no puede faltar?
- El "Guatón Loyola", es tradición desde que yo nací.
- ¿Salió a encumbrar volantín?
- No, cuando era chico salía, pero ahora ya no. Mis hijos salen con sus pequeños, pero ya no lo invitan a uno.
- ¿Cuál es su juego tradicional favorito?
- Lo mío eran las bolitas, ahí le pegaba un poquito más. El emboque y el trompo requieren coordinación, así que eran frustrantes para mí. Tampoco nunca intenté hacer un palo encebado, no habría despegado ni medio metro.
- Entre choripán y empanada...
- Soy un hombre pluralista, de ideas amplias, así que generalmente parto por la empanadita que tiene que ser picantita y después le hago al choripán, pero para mí este último es el rey.
- ¿Qué no tiene que faltar en su asado?
- Me ocurre una paradoja. Le hago a la empanadita y al choripán, y cuando llega la hora de sentarse a comer ya se me pasó el hambre. La carne queda para después, para el repechaje.
- Un clásico del 18 es la parada, ¿la vio?
- Sí, esta vez la gracia estuvo en la disciplina, y la gallardía, y que se puso énfasis en el personal. Además, después hubo un cóctel con la Presidenta y las autoridades, y me quedé conversando hasta las 11 de la noche. Se da un espacio muy bueno, fue lo más novedoso de las Fiestas Patrias para mí.
Ficha técnica:
Alejandro Guillier, 63 años
Senador por Antofagasta
El honorable, durante el 18 le hizo a la chicha y las empanadas, aunque admite que baila un tipo especial de cueca, que denomina la "cueca rara".