¡Tiramos toda la carne a la parrilla!

Todo periodista sabe que arriesgar la vida es parte de la profesión y por eso aceptamos, con orgullo, una misión que más parecía penitencia: Recorrer las picás más clásicas e investigar cómo se habían preparado para el partido de la Roja.

Había que ponerle el hígado a las balas e infiltrarnos en el submundo del terremoto, el chichón, los chunchules y las patitas de chancho.

Si bien este vivencial en cinco puntos clave del condumio permitió desclasificar la forma como nos castigarán el hígado, nuestro enviado especial sufrió efectos secundarios que se aliviarán sólo con el triunfo chileno.

"PIDEN CHUNCHULES LIGHT"

El vía crucis partió en el tradicional Pipeño, local del Barrio Franklin y regalón de La Cuarta. "La parrilla para dos, vale $5100, el pipeño, dos lucas y el terremoto $2.400. Algunos patudos piden chunchules light", contó doña Ana María. Para comprobar si lo que nos mostraron no era de utilería, probamos un lorito blanco y medio chichón. Sólo por motivos profesionales.

LA PICÁ DE JUSTICIEROS Y OFICINISTAS

El Lagar de Don Quijote, en Catedral con Morandé, tiene una clientela especializada y lo confirma Jazmín Castillo, administradora: "Sí, aquí vienen muchos abogados, oficinistas y periodistas". La parrillada pa' 4 sale &$12.900, pero hay pollo al coñac para variar. Ah, el bogoña vale $3.390 y está de rechupete, nos contaron.

"TENEMOS HASTA GUAYÚ"

Si quiere quedar bien con la pierna, de ternero o porcino, nada como El Novillero ubicado en Moneda. Su dueño, Víctor Abruzzese, reveló: "Aquí es pura calidad. La parrillada para cuatro está a $19.900, la botella de vino entre 3.500 pesos y 40 lucas. Y tenemos hasta carne de guayú ¿Qué se sirven? ¡Jaime, dos schoperos para tinto!".

EL TATARABUELO DEL ARROLLADO

Ya nos había agarrado viento de cola cuando llegamos al Pancho Causeo, en Ecuador con General Velásquez. "Sírvanse algo para que se recuperen", nos ofreció Álex Aliaga, nieto del fundador. "No, bueno, ya", respondimos ante una nutritiva pichanga y buen  vaso de leche con plátano en helado de piña. "A tu papá, el Dióscoro, no hayamos cómo echarlo de acá cuando viene", me palanquea el mozo y me cuenta: "Tenemos ofertas mundialeras. $15.900 la parrilla de lujo para cuatro. Un pitcher de terremoto más media pichanga a 8 mil 500, medio arrollado, más terremoto y papas cocidas a $4.500. Y tenemos  proyectora para ver el partido. Oiga, despierte pués".

A PURO FILETE CHARRÚA

Es cierto, a las Parrilladas Uruguayas, ahí en José Domingo Cañas con República de Israel, la tenemos de casera. El patrón, Juan Araya, prometió romperla: "Habrá parrillada para 5 por $19.900 con 2 lomitos, 2 chorizos, costillas, asado de tira y pollo. Y por hoy, no te cobraré lo que me debes". Grande.

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