Ramón Álvarez (40) estaba métale taladro dentro de un pozo de 4 metros en una "contru" de Colina, cuando se produjo un deslizamiento de tierra que dejó sepultado el 80% de su cuerpo.
Recién después de una hora sus cumpas se dieron cuenta del hecho y llamaron a bomberos para que lo fueran a sacar del hoyo.
Ayer a las cinco de la mañana y después de 18 horas de sudar la gota gorda, bomberos logró liberar al trabajador, quien sufrió "lesiones contusas" y principio de hipotermia. "Fue un milagro", dijeron sus familiares.
"Fue rescatado con vida, en perfectas condiciones de salud, se encontraba con algún principio de hipotermia por la temperatura, pero no presentaba mayores problemas físicos ni de salud", soltó el comandante de Bomberos de Colina, Sebastián Benítez.
Inmediatamente Álvarez fue trasladado a la Asociación Chilena de Seguridad, en Provi, donde le hicieron un chequeo completo.
En horas de la tarde el médico jefe del servicio de Urgencia del Hospital del Trabajador, Cristian Arancibia, señaló que el paciente se encontraba "de buen ánimo y lúcido, aunque bastante afectado emocionalmente. Está apegado a la fe y en buenas condiciones para salir adelante".
El doc además mencionó que el hombre no sufrió lesiones mayores porque pudo mantener la cabeza despejada, tener buena ventilación y recibir apoyo anímico e hidratación. Agregó también que recibirá apoyo sicológico después del tremendo susto.
La pesadilla que vivió trabajador al caer en un pozo | La Cuarta