Benedicto XVI proclamó beato a su antecesor en una solemne ceremonia celebrada en la plaza de San Pedro, del Vaticano, a la que asistió más de un millón de personas de todo el mundo, incluidos decenas de fieles chilenos.
El actual Sumo Pontífice provocó una tremenda ovación cuando dijo: "Concedemos que el venerado siervo de Dios Juan Pablo II, Papa, sea de ahora en adelante llamado beato".
Otro momento de júbilo ocurrió cuando una gigante foto de Karol Wojtyla tomada en 1995 fue desplegada en el balcón central de la basílica".
A pesar que se le atribuyen 251 milagros, el que fue aprobado por la Congregación para la Causa de los Santos es la curación inexplicable a la monja francesa Marie Simon Pierre, que padecía desde 2001 Parkinson, la misma enfermedad que sufrió el religioso polaco. La maravilla es que varios meses después de la muerte de Juan Pablo II, la monja, que rezaba continuamente al Pontífice, curó de la enfermedad.
La beatificación del Papa, quien falleció el 2 de abril de 2005 a los 84 años tras una larga enfermedad, es el paso previo a la canonización y se realizó en un tiempo récord, inferior a los cinco años habitualmente necesarios para iniciar el proceso.
Aunque las normas canónicas exigen que transcurra ese lapso después de la muerte del fiel para iniciar un proceso de beatificación, el Pontífice puede dispensar ese plazo, y así lo hizo el actual líder de la Iglesia Católica.
Algunos detractores del fallecido Papa critican que durante su mandato la Iglesia no realizó un mea culpa (como el actual) por los abusos sexuales de algunos religiosos, y también lamentan la "postergada" condición de la mujer en la Iglesia.
¡Aun así, lo de ayer fue una fiesta multitudinaria!
NUESTRAS BANDERITAS SE CONFUNDÍAN CON EL ROJO Y BLANCO DE LAS POLACAS
Matilde Burgos vive hace cuatro años en Italia y cubre para Canal 13 los grandes eventos del Vaticano. La periodista nos contó que los brillos más multitudinarios que ha reporteado siempre han tenido un punto en común: Su relación con Juan Pablo II.
"Su funeral fue impresionante, de días y días, se hablaba de cuatro millones de personas, es lo más masivo que he visto acá. Ayer había mucha gente, pero no vi tantas banderas chilenas y se confundían con las polacas. Cuando descubrieron la imagen de Juan Pablo II, fueron diez minutos de aplausos y emoción".