"A escondidas... cada tarde, a escondidas... como un cobarde", dice la canción de Camilo Sesto y que parece entender el corazón de tantos empleados que deben limitarse a las miraditas cómplices para que en la pega nadie se entere de su amor secreto.
Y es que una encuesta sobre romances en la pega efectuada por el sitio Trabajando.com sapeó que nada menos que un 38 por ciento de los chilenurris admitió que más de alguna vez pololeó con un colega.
Sin embargo, Cupido tiene que andar piola en la oficina, porque la mayoría de los enamoradizos trabajadores dice tener miedo de perder la pega por andar rompiendo corazones.
SÚPER PIOLA
Un 26% reconoció que ha mantenido sus amoríos bajo siete llaves y que no le contarían ni a su mamita linda sobre su relación extralaboral en la pega.
Al otro litro, el 5,7% demuestra su amor frente a todos sin importar el qué dirán, carepalta. "Es mejor ser honesto antes de ocultarse frente a los demás", dicen los apóstoles de Cupido.
Otra papita que reflejó el sondeo realizado a más de 3.450 corazones, es que muchos de los romances de oficina perduran largo rato e, incluso, varios terminan pisando el palito.
Juan Pablo Swett, gerente general de Trabajando.com enfatiza que "los amoríos en el trabajo no deben afectar el rendimiento y la producción de los trabajadores".
Además, quienes ya están flechados deberán aprender que "lo laboral tiene que quedar en el ámbito laboral y lo personal no debe sumar ni contaminar lo otro".
MEJOR NO
Frente a los galanes de oficina hay otros que juran de guata que jamás le echarían el ojo a una colega, por más buena que esté.
El 61% aseguró que nunca ha tenido una relación amorosa en la oficina., y de estos, el 34,5 por ciento afirmó que jamás de los jamases tendría una relación en la oficina. "No me fijaría ni en mi joven secretaria" dijo un anónimo escupiendo al cielo.
No obstante el 27, 4% de quienes niegan algún flechazo afirman que no les importaría encontrar el amor tras un escritorio.
Para el Día de los enamorados, la mayoría de las parejas de la pega, prefieren pasar inadvertidas, por eso prefieren celebrar con flores y globos de corazón en la intimidad y no llegar con un ramo a la empresa. Mejor pasar piola.