Además de la primera paciente en traer la cepa al país, también se formalizará a su hermana y a su cuñado, quienes incumplieron las normas.
Acusada de mentir en sus declaraciones a la seremi de Salud del Maule, vulnerando así los protocolos sanitarios en su traslado desde Santiago, este jueves será formalizada la primera contagiada con la variante Delta del coronavirus en el país.
Recordemos, la mujer de 43 años ingresó a Chile, proveniente de Estados Unidos, el pasado mes de junio.
En la audiencia, además de la "paciente cero", serán formalizados dos de sus familiares: su hermana y su cuñado, luego de que de igual manera incumplieran las indicaciones de las autoridades sanitarias.
La historia es más menos conocida: en junio, durante uno de los balances diarios, la jefa del Departamento de Epidemiología, Alejandra Pizarro, se refirió al caso de esta mujer:
"La persona llegó a Chile el 4 de junio con un PCR negativo, se tomó un nuevo PCR en el aeropuerto, luego se dirigió a un hotel de tránsito donde permaneció una noche", explicó esa vez la experta.
Y agregó: "Con este nuevo resultado negativo, la persona solicitó continuar su cuarentena de viajeros en su domicilio por razones humanitarias, situación que fue evaluada y acogida por la autoridad sanitaria regional".
"El día 12 de ese mismo mes, durante una visita domiciliaria previo al término de su cuarentena, se le tomó un antígeno que resultó positivo. Como resultó positivo, se envió inmediatamente a residencia sanitaria (...); la persona estuvo en residencia sanitaria hasta el día 22 de ese mes. Durante el período, presentó solo tres días síntomas leves", cerró.
La mentira
Todo cambió el pasado 30 de junio, cuando la seremi de Salud del Maule, Marlenne Durán, aseguró que la paciente de 43 años mintió en la investigación: no había cumplido con los protocolos sanitarios.
"Nos encontramos con que el funeral había sido realizado el día 5 de junio y no el día 4 como nos había relatado la paciente y su grupo familiar", argumentó.
Y cerró: "Nuevamente volvimos a insistir en conversaciones con la paciente y su grupo familiar, quienes finalmente terminaron reconociendo que la paciente había faltado a la verdad en la investigación epidemiológica y que ella sí había llegado al final del funeral".