Vecinos de Plaza Italia no dan más: piden frenar las lacrimógenas

Ya perdieron la paciencia. Desde el inicio del estallido social, Plaza Italia, rebautizada como la Plaza de la Dignidad, se convirtió en el escenario de enfrentamientos entre manifestantes y Carabineros, teniendo como principales afectados a los vecinos del sector, que ya no dan más con los efectos del gas lacrimógeno.

Según cuentan los mismos involucrados, fueron las más de 60 bombas contabilizadas en un día lo que motivó a un grupo de 400 personas a organizase y presentar ayer un recurso de protección en la Corte de Apelaciones de Santiago, para evitar el uso indiscriminado de estas bombas.

"Hemos vivido el abuso de poder y la violencia de Carabineros. Muchos vecinos hemos sido apuntados por armas y vivimos en medio de un gas todo el día. Esto nos trae problemas de salud mental, por vivir en la llamada 'zona cero', y también médico, porque han aumentado los casos de bronquitis en los bebes, gastritis y alergias, esto sumado a que muchas veces no podemos entrar o salir de nuestras casas", detalló Laura Quintana, vecina del sector.

"La idea del recurso es que Carabineros utilice su protocolo. No lo está ocupando en la actualidad. No deberían tirar bombas lacrimógenas como las están tirando. Suponemos que este debería hacerse efectivo en un plazo de uno o máximo dos meses", agregó el abogado Ernesto Artigas.

Los riesgos para la salud por exposición a gases

Un análisis realizado por un grupo de internos de la Escuela de Medicina de la Universidad de Valparaíso expuso los riesgos que trae para la salud la exposición a los gases lacrimógenos.

A los ya conocidos efectos inmediatos, que van desde irritación en los ojos nariz, boca y piel, el informe advierte que "existe un serio riesgo para los que sufren de Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica y también para quienes padecen hipertensión arterial".

En los casos más extremos o de mayor exposición a las bombas están "bronco espasmos, neumonitis y edema pulmonar agudo". A los que se suman los cardiovasculares: taquicardia y aumento de presión sanguínea. También, en casos específicos, "infarto agudo al miocardio y falla cardíaca, y en menor medida, gastroenteritis severa con perforación".