No es lo mismo tener garganta de lata que ser el hombre de lata. Así también lo puede decir Arturo Vidal, quien ya cuenta con su propia escultura a base de chatarra, creada por las manos mágicas de Patricio Manzo.
El hombrón, que se ha lucido creando con metales al "Quijote de la Mancha", "Depredador" y otros simpáticos personajes, ahora se pegó el salto para armar un Arturo Vidal de dos metros y 60 kilos, que quedó igualito.
"Me falta puro entregársela. Es un regalo que le tengo al Arturo Vidal y que fue hecha con mucho cariño y esfuerzo", le contó Patricio a La Cuarta.
- ¿Cómo nace esta idea?
- En la previa del partido contra Bolivia fui a Juan Pinto Durán y le llevé de regalo a Vidal una escultura del Quijote. Le dije que él también es un guerrero, un soñador, y que siendo así nos llevaría al Mundial de Rusia.
- ¿Y cómo le crujió para la escultura de Vidal?
- Saliendo de ahí me entrevistaron varios medios y un periodista de 24 horas, Rodrigo Arellano, me desafió a crear una escultura de Vidal. Yo asumí y dije que en un mes la tendría lista para dársela al Arturo.
- No la ha recibido...
- Estoy tratando de que lo haga. Él y su familia ya la conocen. Tengo contacto directo con su hermana y sé que les ha gustado, pero mi idea es entragarla personalmente, porque es un regalo. De todas formas no quiero molestarlo, sé que está mentalizado, pero sería bonito.
- ¿Y en el portón le hacen tapita?
- Para el partido con Perú no dejaban entrar a nadie, como habían perdido con Ecuador. Entonces los ánimos no eran de los mejores, pero tengo fe que ahora se podrá.
PURO TALENTO
- ¿La mohica es de latas de pilsen?
- Fue harto trabajo. La cara se la hice tres veces a puros martillazos hasta que la última me salió bien.
- ¿Y el cuerpo?
- Está hecho con tambores de aceite que corto, los volteo y le doy forma. Sus cejas son de fierro de construcción y tienen el detalle del corte de las cejas. Los ojos son polines de rodamientos, los dientes son chavetas, la barba son piolas de acero, las manos cubetas de rodamiento y pernos, y los cordones de alambre. Es pura chatarra, podríamos decir que es el Vidal de chatarra.
- ¿Y cuándo puede costar una obra así?
- Creo que un millón, pero para Vidal será un regalo.