Con la pera quedaron unos gendarmes de la cárcel de Chillán luego que el diario local La Discusión soltara un video que muestra a un grupo de guardias dándole, y no consejos, a un grupo de presos.
Y no es para menos, porque luego de la salida de madres de los de verde oscuro del 1 de marzo de este año, todos los involucrados fueron suspendidos de sus funciones y se inició un sumario para determinar responsabilidades. A esta altura el Consejo de Defensa del Estado y el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) ya se involucraron como querellantes, así que la cosa está que arde.
Las malas lenguas juran de guata que el atado comenzó en el patio 5 del penal a eso de las 10:00, cuando por unas discusiones sobre quién iba a usar el teléfono público, los guardias decidieron dejarlos sin tono para llamar. Los preciosos no quedaron nada de felices con la medida y empezaron a patalear con cuática
Cacha el video. Vas a quedar pa' dentro.
