El material genético se encontraba en la ropa interior y en el cuerpo de la víctima, una joven de 21 años. Se ratifica, así, lo que presenciaron los testigos hace unos meses.
El pasado 28 de febrero tuvo lugar un terrible delito en la calle Serrano, Palermo, Argentina. Allí, alrededor de las 15.00 horas, vecinos notaron que un grupo de sujetos abusaba sexualmente de una joven al interior de un vehículo estacionado. Entonces, intervinieron y, por su cuenta, lograron retener a seis tipos. Cuatro de ellos estaban en el auto, con la víctima, mientras que los otros dos se encontraban afuera, aparentemente tocando guitarra. Para el juez Marcos Fernández, sin embargo, observaron y convalidaron el ataque sexual.
Por eso, en marzo los seis tipos —Ángel Pascual Ramos (23), Thomás Domínguez (21), Lautaro Pasotti (24), Ignacio Retondo (22), Steven Alexis Cuzzoni (20) y Franco Lykan (24)— fueron procesados por “abuso sexual con acceso carnal, agravado por la intervención de dos o más personas”.
En las últimas horas, los tipos nuevamente fueron noticia: luego de llevar adelante los peritajes y las pruebas de rigor, las autoridades trasandinas detectaron ADN en dos de los seis antisociales. En concreto, Hugo Figueroa, abogado de la víctima —de la que se ha resguardado su identidad por petición del juez—, explicó que los perfiles genéticos que se hallaron en la ropa interior y en el cuerpo de la mujer de 21 años corresponden a Lautaro Pasotti y Ángel Pascual Ramos.
Los peritajes vienen a confirmar lo que ya habían presenciado los testigos esa tarde, cuando vieron a los dos sujetos forzando relaciones sexuales con la víctima sobre el auto modelo Volskwagen Gol.
En aquella oportunidad, el juez Marcos Fernández determinó que el grupo habría perpetrado la violación confeccionando “un plan previo, con acuerdo de voluntades y roles”. Del mismo modo, determinó que la joven estaba en un evidente estado de vulnerabilidad, luego de haber consumido alcohol, marihuana y anfetaminas, situación que no le permitía estar en condiciones para consentir ningún acto de tipo sexual.