El viudo soldador que viajó a la Antártica por sus dos hijitos

Jacob Pizarro perdió  hace 5 meses a su esposa producto de un cáncer. El 2018 fue al continente blanco.

Hace solo 5 meses que los hijos de Jacob Pizarro Gatica (38), uno de los desaparecidos del accidente de la FACh en la Antártica, habían perdido a su madre. Aún no se recuperaban de dicha situación y ahora ambos pequeños piden que su padre regrese con ellos.

Caco, como llaman sus conocidos a Jacob, viene de una familia muy religiosa, de ahí su nombre. El 2013 conoció a Oriana Curivil, con quien tuvo dos pequeños, de 2 y 6 años. Por su trabajo como soldador eléctrico le tocaba viajar bastante por Chile.

Vida de viudo

A fines del año pasado le llegó una noticia que le cambió su vida: A Oriana le detectaron un cáncer en su fase terminal, y le quedaba solo un par de meses de vida.

"El año pasado estuvo durante 6 meses realizando la instalación en la Antártica. Luego de enviudar, la madre de Jacob se vino desde Quilimarí (Región de Coquimbo) para cuidar a sus nietos. Su pasatiempo era trabajar solamente por su familia y por sus hijos", señaló Alberto Valdivia, tío del Caco.

Jacob ahora solo iría por 3 días a hacerle mantención a la instalación en el continente blanco: ahora es buscado en el Paso Drake junto al resto de los pasajeros y tripulantes.

El espadachín de la FACh que iba al mando del Hércules C-130

Como un experto en aviones y uno de los que conoce más que nadie a sus queridos Hércules, es recordado el comandante Ítalo Medina, el piloto al mando del C-130.

Medina, que se graduó hace 20 años de la Escuela de Oficiales de la Fuerza Aérea de Chile, destacó desde antes de egresar entre sus pares.

Además de volar, la otra pasión de Medina es el esgrima,  sacando el tercer lugar en un torneo realizado por la Federación en la especialidad sable. Sin embargo, su pasión son las alas.

En su pecho luce orgulloso su parche rojo de piloto de combate, especializándose en el manejo de Hércules, a los que conoce al derecho y al revés.

Uno de sus récords que llenó de orgullo de la FACh es que es el único que pudo abastecer en aire a cuatro cazas Hornet en vuelo. Además, llevó planeadores hasta la Cordillera de Los Andes.

Junto al segundo piloto de la FACh, Héctor Castro, dirigían la aeronave que hoy es buscada hasta con tres satélites.

Arriba (del avión) iban dos pilotos con mucha experiencia (...), tuvimos la oportunidad de verlos operar en los último ejercicios en EE.UU. (…) donde tuvieron una excelente participación", dijo el general el comandante en jefe de la Fuerza Aérea, general Arturo Merino Núñez.

Temas Relacionados

COMPARTIR NOTA