La linda Viví Rodrigues dejó en el olvido la xuxuca y ya no mueve las pompas al ritmo del axé: ahora se dedica a la lectura.
Específicamente, lee clásicos como los Tres Chanchitos y el Lobo, Blanca Nieves y los siete enanitos y Caperucita Roja. ¡Todo sea por los peques!
La bailarina brasileña recibió una oferta que no pudo rechazar ahora que es mami: contar cuentos infantiles pa’ los niños en la 16º versión de la feria Panza y Crianza, en el Club Providencia.
''Con mi hija lo hago todo el tiempo y quedé muy contenta con la idea de participar. Me parece interesante poder compartir con los niños. Es algo que me gustaría seguir haciendo y ver cómo nos va”, explicó la ex Axé Bahía.
Con toda la onda onda, buena onda, Viví señaló que la idea también es relatar algún texto en portuñol. ''Estoy viendo qué cuento puede ser, pero para estimular los idiomas y que los peques tenga una experiencia nueva quiero contar uno en portugués'', afirmó.
''La morena contó que su plan es hacer algo ultra lúdico, aunque “no me voy a disfrazar de Caperucita Roja, pero seré bien teatral para que les guste''.
Viví, que es mami de dos peques, señaló que entre sus libracos favoritos estaba La Cenicienta y explicó que el fin de esta actividad es que ''los niños vuelvan a estimular su imaginación. Ahora, con los celulares muchos papás han perdido la costumbre de leer cuentos y se pierde ese vínculo. Además, hace que tengan mayor imaginación''.
La bailarina, que parlará por cerca de quince minutos, cacha que tendrá que hablar um poquinho mais lento pa' que la entiendan y soltó que está ultra emocionada con su participación. ''Sé que va a salir bien'', tiró.
Nueva vida
Viví cacha que siempre será recordada por la xuxuca, pero ella ya dio vuelta la página: ''son etapas de la vida. Ahora, estoy en la etapa de la mamá. Tengo nuevas posibilidades de trabajo relacionado con eso e incluso escribo en un blog''.
La gracia es que en ese blog (que lo pilla en vivirodrigues.cl/blog), Rodrígues da un lote de consejos para las mamis primerizas.
''Creo que el consejo se da a quién lo pide. En general se arma una comunidad muy fuerte de las mamás, pero cada una sabe como criar a sus hijos. Sólo es una ayuda'', concluyó.