Este domingo, a 19.00 horas, los fanáticos de la lucha libre vivirán WrestleMania, el evento más esperado de la temporada y que hipnotiza por más de cinco horas a sus seguidores.
Y es que el "monstruo" creado por Vincent McMahon, articulador del imperio que es hoy World Wrestling Entertainment (WWE), encontró en este evento, que se realiza en abril, una máquina que mueve millones.
El 31 de marzo de 1985, en el Madison Square Garden, Nueva York, debutó este espectáculo concebido como una transmisión de prepago y que el año pasado anotó cifras récord: US$181,5 millones en impacto económico en Orlando, la ciudad sede, más de 75 mil asistentes al Camping World Stadium, 1,95 millones de personas conectadas a internet y millones de televidentes en el mundo (en Chile se puede ver por Fox Sports Premium).
Las diferentes plataformas que dispone WWE Network permiten que más de 800 millones de hogares en 180 países puedan verlo, además es traducido a veinte idiomas, convirtiéndolo así en una de las transmisiones pagadas más importantes del calendario anual, al nivel del Super Bowl o de la final de la Champions League.
El símil con el "super tazón" es obligado y aunque la final de temporada del fútbol americano el año pasado tiene cifras impresionantes -como los 1,2 billones de dólares gastados en cerveza o las 100 mil toneladas de paltas exportadas desde México-, Minnesota, la ciudad sede, se embolsó 130 millones de dólares, US$51 millones menos que lo que le generó a Orlando la edición 33 de WrestleMania.
El año pasado, sólo el consumo generado en el estadio fue de US$ 14,5 millones, pero esta danza de millones también impacta en otros países y el mercado chileno es uno.
"Las semanas previas a WrestleMania siempre hay más movimiento. Las poleras de súper estrellas como AJ Styles, Roman Reigns o Brock Lesnar, son las más cotizadas", afirma Juan Carlos Guzmán de la tienda "Breaking Point", ubicada en el Eurocentro, y que suma filas de clientes en la previa del espectáculo.
Lo cierto es que el Mercedes-Benz Superdome de New Orleans, será testigo de cómo los principales talentos de la compañía intentarán entrar al Olimpo de la lucha, pero más allá de vencedores y vencidos, la billetera de WWE seguirá creciendo como lo ha hecho año tras año.
"Estar allá es algo inexplicable"
Como suele pasar en todos los eventos a nivel mundial, la bandera chilena es algo que no puede faltar en las tribunas y varios son los que se han dado el lujo de asistir a un WrestleMania.Es el caso de Alicia Peralta, fanática de 28 años y que asistió en 2017.
"Estar allá es inexplicable, porque son muchos los shows que marcan ese fin de semana. Es todo lo que viste en TV, pero un millón de veces más grande", explica la periodista de la radio INJUV.fm, quien además aporta un dato: "en el evento noté que cambiaban la lona del ring entre algunas peleas, esas cosas no las ves en la transmisión".
Otro que vivió la experiencia fue Felipe Gutiérrez, conductor del programa "Suplex", en radiodispersa.cl, quien resalta como en la ciudad sede "se respira lucha".
"Toda la comunidad vive el evento y te encuentras con gente de todo el mundo. Es como un mundial de fútbol, pero con la diferencia de que tienes acceso a todo, incluso te encuentras con los luchadores en las calles. Es indescriptible", reflexiona Felipe, antes de pasar un dato a los entendidos: "el retorno de Daniel Bryan a los rings es algo inesperado y que marcará este WrestleMania. Será el momento destacado de esta edición".