El ídolo del fútbol padecía un cáncer que lo complicó severamente durante su final.
La leyenda fútbol, Pelé, murió a sus 82 años tras haber enfrentado un duro cáncer que lo complicó durante el último par de años, confirmó su hija la tarde de este jueves 29 de diciembre.
“Todo lo que somos es gracias a ti. Te amamos infinitamente. Descansa en paz”, escribió Kely Nascimento en su cuenta de Instagram, confirmando la partida del astro brasileño.
Edson Arantes do Nascimento había sido operado en septiembre del 2021 luego de que le detectaran un tumor en el colon.
Así, posteriormente, inició un tratamiento con quimioterapia que derivó en distintas hospitalizaciones que en más de una ocasión desataron alta preocupación incluso una vez salió a descartar los temores: “Tuve que publicar esto porque existen noticias falsas circulando sobre este asunto”, declaró en sus redes sociales. “Estoy ganando este partido”, aseguró.
La última hospitalización había sido a fines de noviembre, instancia en que se habló de que sufría una hinchazón generalizada del cuerpo, un síndrome edemigénico, un edema generalizado, y además de una “insuficiencia cardíaca descompensada”.
La leyenda
Para muchos, “O Rei” es considerado sin discusión el mejor jugador de la historia, mientras que algunos lo han rivalizado durante largos años con su símil argentino, Diego Maradona.
Jugó durante gran parte de su carrera en el Santos, club en el cual, por supuesto, se convirtió en ídolo, ganando incluso dos copas Libertadores (1962 y 1963). La última etapa de su carera, entre 1975 y 1980, la hizo en el New York Cosmos.
Se habla de que, incluyendo partidos no amistosos y competiciones no oficiales encajó 1.281 goles en un total de 1.363 encuentros. En cuanto a torneos oficiales, con 769 conquistas, es tercero detrás de Cristiano Ronaldo y Lionel Messi, según RSSSF.
Era sumamente eficaz al momento de definir frente al arco y generar juego desde atrás. Le pegaba muy bien con ambas piernas y ocupaba con habilidad y fuerza el cuerpo, una habilidad que resultaba especialmente cuando aún no se incorporaban las tarjetas rojas al fútbol, lo que desataba una lluvia de patadas de parte de los defensas rivales. No había cómo bajarlo.
El eterno “10″ fue campeón del mundo con la selección brasileña en tres ocasiones: en Suecia (1958), Chile (1962) y México (1970), siendo el único futbolista tricampeón en el máximo torneo.
El primer de estos títulos lo consiguió con tan solo 17 años. Era el inicio de la leyenda.