El álbum íntimo del "Chaco" antes del viaje

Juan Manuel Insaurralde es prenda de garantía en defensa y agente goleador, lo que Colo Colo espera aprovechar en el duelo en Brasil por la Libertadores.

Las estadísticas no mienten. Juan Manuel Insaurralde ha jugado más de 300 partidos en su carrera y 30 de ellos han sido en Copa Libertadores. Sí, el mismo campeonato donde el miércoles tendrá miles de ojos sobre su figura: llega a Brasil como estrella del Popular y regalón de los hinchas.

Pero no es sólo por el tanto que le marcó a la "U" en el último derbi y que lo consolida como sorpresivo goleador, en tres partidos consecutivos. El defensa, además, emocionó al estallar en lágrimas por un tema "personal" y La Cuarta quiso mostrar la faceta más íntima del, hasta el sábado, hombre "duro" de la última línea.

El querido "Chaco" es hijo de un electricista de autos y una dueña de casa, y es el segundo de cuatro hermanos. Además, su familia es muy religiosa y en su niñez desestimó la práctica del judo. Tenía porte y fuerza, pero no era de su agrado, así que se inclinó por el fútbol, pasando por Boca Junior y Spartak de Moscú, entre otros.

Insaurralde contrajo matrimonio con la argentina Lucía Carrara y es papá chocho de Mía, de 11 años, y Juan Bautista, de 6. Con ellos, de hecho, vuelve a ser un "loco bajito" y se entrega sin culpa a los placeres propios de la niñez, como bailar frente a un espejo, por ejemplo.

Sí, el apoyo de ellos es fundamental para superar las dificultades actuales, aunque los alboadictos también y la familia futbolera también están en la fila. Todo para que el "Chaco" sea leyenda en el Cacique, donde ya suma 26 partidos (7 en la Copa) y 3 goles.

Conchito. El defensa del Cacique hace todo por sus pequeños, incluso disfrazarse de superhéroe.

Juan Bautista, además, se contagió del gusto por el PlayStation, por lo que es un momento íntimo padre

e hijo.

Con los regalones. Como Juan Manuel Insaurralde ha vestido las camisetas de Boca Juniors, Spartak de Moscú, Paok (Grecia) y Jaguares de Chiapas, su familia está acostumbrada a hacer las maletas y acompañarlo sin discusión. Las vacaciones son sagradas.

Con personalidad. Mia demostró tener condiciones para el baile, y su papá Juan Manuel no se quedó atrás. Frente al espejo le siguió el ritmo con una contagiosa melodía.

Pasión oculta. Así como en un momento pudo dedicarse al judo en lugar del fútbol, el "Chaco" también sorprendió con su gusto por la pesca, pasatiempo que comparte con sus amigos cercanos.

Un ejemplo. Juan Manuel es un afortunado. Aparte de su bella esposa, el futbolista tiene dos hijos: Mía, de 11 años, y Juan Bautista, quien cumplió 6 en junio.

Amor. En un romántico paseo por Venecia. "Te volvería a elegir toda la vida", fue la dedicatoria de Lucía Carrara.

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